
Nicolás Sarkozy se ha llevado un buen susto a la salida de un encuentro asambleario con los alcades del departamento francés de Lot-et-Garone, al sur del país.
Un hombre ha aprovechado el momento en el que el presidente francés saludaba a los ciudadanos que le esperaban a la salida del evento para agarrarle de la chaqueta y tratar, sin éxito, de tirarle al suelo.
En pocos segundos, la seguridad personas del presidente se ha abalanzado sobre el agresor para reducirlo. El agresor ha quedado bajo custodia y por el momento se desconoce su identidad y las razones que le llevaron a zarandear a Sarkozy.
Sobre el agresor se ha abierto "el proceso judicial normal", han explicado fuentes de la Gendarmería. Fuentes judiciales consultadas por France Info han indicado que los hechos podrían ser considerados como un caso de violencia con agravante y derivar en una condena de hasta tres años de prisión y 45.000 euros de multa.
Esta no es la primera vez que el mandatario galo sufre un altercado público. Durante su primer año de gobierno tuvo varios enfrentamientos verbales, pero nunca físicos.
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