Sindicatos de Policía han defendido este domingo la actuación de los integrantes de la escolta de seguridad implicada el pasado viernes en un incidente en la residencia de la embajadora mexicana en La Paz (Bolivia). En un comunicado, el Sindicato Unificado de Policía (SUP) ha defendido que los agentes actuaron de conformidad a la legalidad internacional y "sin responder" a las provocaciones y ha achacado el uso de "bragas tácticas" que cubrían parcialmente su rostro para evitar ser grabados y proteger así su seguridad.
Por su parte, el sindicato Jupol ha expresado en otro comunicado su apoyo a los policías implicados y, tras denunciar la difusión de datos falsos de la identidad de los agentes, ha pedido a la Dirección General de Policía que actúe para aclarar de forma transparente los detalles del incidente "en defensa de los agentes, su profesionalidad y su honor".
La Unión Federal de Policía ha manifestado que los agentes que acompañaban a los diplomáticos españoles cumplían órdenes y achaca al Gobierno español cualquier responsabilidad por el incidente. Indica en un comunicado que, "sin perjuicio" de la investigación y esclarecimiento sobre los hechos, los policías españoles estaban "cumpliendo órdenes giradas por conducto reglamentario" y responsabiliza así al Ministerio del Interior, Asuntos Exteriores y el Gobierno de España" de "cualquier actuación que merezca reproche".
Reitera la UFP que las labores de los agentes se "enmarcan dentro de la defensa de los intereses del Estado español" y aclara que "nunca pueden ser chivos expiatorios de los errores de los políticos". "La práctica de escoltar a autoridades diplomáticas españolas en otros países, con o sin armas, dependiendo de la autorización del país en que se encuentren, es muy habitual", añade la UFP.
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