Siria. Margallo secunda que damasco entregue sus armas químicas para ser destruidas

El ministro de Asuntos Exteriores y Cooperación, José Manuel García-Margallo, secundó este martes la iniciativa que se está promoviendo en Naciones Unidas con el fin de que Siria entregue sus armas químicas para que puedan ser destruídas.
Durante la sesión de control al Gobierno en el Senado, Margallo aseguró que "por desgracia hasta hace unas horas" el Consejo de Seguridad de la ONU parecía bloqueado pero ahora "se ha abierto una ventana de esperanza" para lograr una posición común de la comunidad internacional.
Margallo subrayó que el Ejecutivo español "sostiene y aplaude" la iniciativa que están promoviendo junto a Rusia los países aliados, ya que esto permitiría una respuesta común del Consejo de Seguridad de la ONU.
A su juicio, el uso de armas químicas contra los rebeldes por parte del régimen sirio "debe ser reprimido" y "merece una respuesta contundente pòr parte de la comunidad internacional", si bien dejó claro que España "no va a participar" en ninguna intervención militar porque lo prohibe la propia normativa de Defensa.
El ministro recordó que para que España intervenga en un conflicto internacional necesita un mandato de Naciones Unidas o de la OTAN, así que recomendó al diputado de la Entesa que "se tranquilice" porque todos sus esfuerzos van dirigidos a "paliar la situación humanitaria catastrófica tanto dentro como fuera de Siria" que se está produciendo en estos momentos.
El diputado de la Entesa Joan Sabaté preguntó "si es cierto que hemos comprometido nuestro apoyo" a EEUU para un ataque militar en Siria, como se filtró en algunos medios de comunicación tras la cumbre del G-20 de la semana pasada.
Sabaté advirtió de que una decisión así "vulneraría la legalidad internacional" y generaría "una situación de conflicto mucho mayor" en Oriente Próximo porque el territorio sirio quedaría en manos de los opositores, entre los que se incluyen los terroristas de Al Qaeda.
El diputado de la Entesa recordó que las investigaciones de los especialistas en armas químicas de la ONU todavía no han concluido y no han aclarado si el régimen de Bashar Al Assad utilizó armas prohibidas contra su propio pueblo.