Solo un 21% de españoles cree que el Estado debe decidir al educar a los niños

Apena una media del 21% de los españoles está de acuerdo que sea el Estado quien decida en exclusiva sobre la educación de los hijos en los colegios, una vez que los padres suelen ser quienes eligen el tipo de centro al que quieren mandarles. Así se desprende de la encuesta realizada por Ipsos para el Grupo Henneo-La Información, con medio centenar de encuestas telefónicas realizada a finales de la semana pasada, para tomar el pulso a la polémica generada por el pin parental entre los partidos políticos.

Paradójicamente, el pin parental no parece ser lo que más preocupa a las familias, que lo ven más como “innecesario y mediático”, si bien en todos los casos queda claro que los padres quieren tener información detallada y algún tipo de control sobre las actividades extraescolares que se imparten en el colegio al que van sus hijos. Es más, en la mayor parte de los casos admiten que ese control, que es lo que se entiende como pin parental, ya lo pueden ejercer sobre los contenidos no reglados ni obligatorios de sus colegios.

La apuesta porque sea el Estado quien decida el tipo de educación que se imparte en los centros escolares se apoya de forma más amplía por parte de partidos como Unidas Podemos (un 42% lo apoya) o el PSOE (27%), mientras que suscita el rechaza en formaciones como el PP (14% a favor) o Vox, donde solo lo admiten un 2% de sus votantes. No obstante, en la mayor parte de las formaciones políticas, cerca de la tercera parte de los encuestados se muestra neutral.

La encuesta de Ipsos para Henneo-La Información deja claro que hay una mayoría de ciudadanos que cree que el Estado debe garantizar en todo caso que la educación refleja la pluralidad de opiniones, promover la igualdad, la tolerancia y la integración; y procurar que todas las comunidades autónomas imparten unas materias similares, con un nivel mínimo de ética y moral, y asegurar que todos los niños tienen acceso a una educación pública de calidad.

De la misma manera, hay bastante unanimidad en que los colegios deben informar en todo momento a los padres de los contenidos que imparten de todo tipo y planificar las actividades del centro de acuerdo a la opinión de la comunidad educativa, todo ello sin salirse del programa docente, en un modelo amplio y diverso, “incluyendo todos los puntos de vista, aunque no esté de acuerdo con la opinión de los padres”. La encuesta admite que los progenitores siempre influyen en la educación de sus hijos porque son los que eligen el centro al que deben ir, si bien es cierto que al igual que tienen información básica de las materias a impartir, es lógico que deban saber que otras actividades o charlas se pueden dar.

Cuando se entra a analizar por partes las temáticas por las que unas formaciones políticas apuestan con más o menos fuerza, queda patente la controversia entre unos partidos y otros. Mientras que desde el PP o Vox se defiende con fuerza que a los niños se les impartan contenidos sobre la defesa nacional, la historia del terrorismo o la religión católica. En el otro lado, los paridos de izquierdas como UP y PSOE, abogan más porque se hable en los colegios de violencia de género, sexualidad e incluso autodeterminación. En el centro de la polémica se sitúa Ciudadanos, que cree que todas esas materias deben estar presentes a la vez en los colegios.