Suiza, tercer país más rico de Europa quiere cerrar sus puertas a los refugiados

La derecha populista y antiinmigración se ha hecho este domingo con el poder en las elecciones suizas. Con un discurso muy centrado en la crisis migratoria, el UDC-SPV ha conseguido hacerse con casi el 30% de los sufragios. Los medios suizos y franceses apuntan precisamente a que la llegada de refugiados sirios al país "sin duda ha jugado a favor" del partido de Toni Brunner, tal y como analizó 'La Tribune de Genève'.

El tercer país de Europa con mayor renta per cápita quiere cerrar sus fronteras a una población que amenaza con desestabilizar el alto nivel de vida de los suizos. Los ultraderechistas han sabido aprovechar este temor acentuada con la llegada masiva de nuevos inmigrantes a Europa construyendo una campaña que en ocasiones se ha plagado de mensajes con tintes xenófobos.Renta Per Capita Europa
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"El voto ha sido claro" dijo Brunner en la televisión suiza tras su victoria, "la gente está preocupada por la inmigración masiva a Europa", apostilló. Y es que, el partido que lidera siempre se ha posicionado a favor de las restricciones migratorias como la acordada hace más de un año cuando los suizos respaldaron en un referéndum la imposición de límites a los extranjeros que viven en el país.Campaña agresiva

Actualmente la mayor preocupación de más de la mitad de los suizos es precisamente la crisis de los refugiados según un estudio realizado por el instituto gfs.bern. La campaña del partido ha sido dura y controvertida en la que ha utilizado caricaturas sarcásticas para reforzar su mensaje. Y parece haber funcionado después de haber logrado los mejores resultados de su historia.

Uno de los dibujos más polémicos y criticados fue el protagonizado por un yihadista ataviado con un brazalete de la Unión Europea y que, empuñando un machete con la inscripción "acuerdo institucional", amenaza con cortarle la cabeza a una joven suiza. La imagen iba acompañada con el mensaje: "Mantenga la cabeza sobre los hombros".L'accord institutionnel coupera la tête à la démocratie suisse. Du terrorisme politique. #chvote#ef2015#judcpic.twitter.com/pAVI0qQAhO— Jeunes UDC Vaud (@JeunesUDCVaud) septiembre 29, 2015

El nuevo gobierno tiene hasta el año 2017 para conseguir alcanzar un pacto con la Unión Europea que garantice la libre circulación de los trabajadores. De no conseguirlo tendrán carta blanca para imponer cuotas con respecto a su propia ley independientemente de cualquier compromiso con la UE.

El país suele decidir este tipo de cuestiones importantes por referéndum, por lo que tendrá que mantener el tono de su mensaje antiinmigración para conseguir que los suizos apoyen sus políticas migratorias frente a la UE, tal y como explica el diario inglés 'The Telegraph'.La redefinición de los acuerdos con el resto del continente en materia de libre circulación será la cuestión más urgente a tratar por el UDC.