El Tribunal Supremo considera que el próximo juicio a la cúpula independentista de Cataluña por urdir un plan de desconexión de España va a ser una "oportunidad excelente" para demostrar la calidad de la Justicia frente a la imagen que se ha querido dar desde fuera del mismo y que "no se ajusta a la realidad", según ha expuesto el presidente del mismo, Carlos Lesmes, en un encuentro informal con periodistas.
En la reunión, convocada a puerta cerrada para dar las claves sobre este macrojuicio contra Oriol Junqueras y otros once acusados, tanto Lesmes como el vicepresidente del órgano judicial, Ángel Juanes, han explicado que el procedimiento, cuya fecha de arranque todavía no está cerrada, supone un "reto" desde el punto de vista organizativo y también como prueba de cara al exterior puesto que se busca "poner en duda" el actual sistema de derecho.
Para el procedimiento, que se estima se prolongue durante tres meses y que se celebrará en sesiones de mañana y tarde, se han solicitado más de 600 acreditaciones por parte de periodistas de más de 150 medios, de los cuáles medio centenar son extranjeros, en su mayoría europeos. En concreto, y según se ha precisado, habrá mayoría de reporteros de Alemania, Francia, Suiza y Holanda, aunque también los hay fuera de las fronteras europeas, como es el caso de Estados Unidos, China y Rusia.
Desde el alto tribunal comparan este procedimiento que está a las puertas de su arranque con el celebrado por los atentados del 11-M que acogió la Audiencia Nacional en el año 2007; de hecho, aseguran que incluso hubo más expectación en la vista por el mayor ataque terrorista sufrido en España que en la actual, si bien son conscientes de la magnitud de este proceso en el que los doce acusados -en su mayoría los exmiembros del equipo de Gobierno de Carles Puigdemont- se enfrentan a una petición de cárcel por parte de la Fiscalía que va desde los siete años a los 25 en el caso del exvicepresidente del Gobierno catalán.
Respecto a la situación de los acusados que están presos (la totalidad de ellos excepto Meritxell Borràs, Carles Mundó y Santi Vila) serán trasladados cada día de juicio a primera hora a las dependencias de la Audiencia Nacional puesto que no hay calabozo para presos en el alto tribunal. De allí serán llevados al Tribunal Supremo, edificio que está a una distancia de unos 50 metros, y accederán al Salón de Plenos, lugar donde se celebrará el juicio. Además se les habilitará una sala para que puedan almorzar en ella durante el descanso que se celebre entre la sesión matinal y vespertina.
Aunque todavía no hay fecha fija para su traslado a las cárceles de la Comunidad de Madrid (decisión que depende en última instancia del Ministerio Interior) los procesados serán llevados próximamente a los centros penitenciarios de Soto del Real en el caso de los hombres (Oriol Junqueras, Jordi Turull, Raül Romeva, Josep Rull, Joaquim Forn, Jordi Sànchez y Jordi Cuizart) y a Alcalá Meco en el caso de las mujeres (Dolors Bassa y Carme Forcadell); mismas cárceles en las que cumplían prisión provisional antes de ir a Cataluña. Con todo, el presidente del alto tribunal asegura que van a garantizar el respeto "más absoluto" a la dignidad de todos ellos.
Si asiste Torra se le tratará "con la deferencia que corresponde"
En caso de que el sucesor de Puigdemont al frente del Govern, Quim Torra, quisiera acceder a la vista, se le trataría con la deferencia que merece en calidad de autoridad pública, según han explicado, aunque hasta la fecha, el presidente de la Generalitat no ha solicitado formalmente su intención de asistir al juicio (como sí ha hecho una delegación del Parlamento vasco). El alto tribunal tampoco ve impedimento alguno en facilitar tanto la traducción simultánea como la sucesiva.
El juicio se retransmitirá íntegramente en directo y se facilitará para ello señal de televisión en abierto. También se podrá seguir desde la página web www.poderjudicial.es la cual se irá actualizando conforme avance la vista. Además se adjuntará un archivo de todas las resoluciones dictadas desde que asumió la instrucción el magistrado de la Sala de lo Penal, Pablo Llarena, hasta el mismo auto de señalamiento y admisión de prueba, que todavía está pendiente de conocerse.
Hemos bloqueado los comentarios de este contenido. Sólo se mostrarán los mensajes moderados hasta ahora, pero no se podrán redactar nuevos comentarios.
Consulta los casos en los que lainformacion.com restringirá la posibilidad de dejar comentarios