Torra no recibe a Felipe VI... pero después le entrega un libro de fotos sobre el 1-O

Quim Torra no ha cumplido con sus amenazas... en parte. El presidente de la Generalitat no ha recibido al Rey a su llegada al Nou Estadi de Tarragona para presidir la ceremonia inaugural de los XVIII Juegos Mediterráneos. Pero, minutos después, sí ha saludado al monarca. 

Felipe VI ha llegado al estadio poco antes de las 21:00 horas y ha sido recibido por el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez. Según han informado a la Agencia Efe fuentes presentes en el acto, el presidente catalán se ha acercado al Rey y le ha entregado el libro del fotoperiodista Jordi Borrás 'Días que durarán años'. En él se recoge lo que los independentistas interpretan como represión policial durante la jornada del referéndum ilegal del 1 de octubre. 

Por La Información

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También, según fuentes de la Generalitat, le ha entregado los informes del Síndic de Greuges, el defensor del pueblo catalán, sobre lo acontecido en esa jornada. A continuación, el Rey ha accedido al palco del estadio seguido de cerca por Sánchez y a una cierta distancia por Torra.

El himno nacional, recibido con aplausos 

Felipe VI se ha situado de pie en el asiento central del palco, y mientras que a su izquierda se han colocado las autoridades políticas, a su derecha lo han hecho representantes de instituciones deportivas. Así, Sánchez se ha ubicado a su izquierda, por lo que el presidente del Gobierno es la única persona que separaba al Rey del presidente de la Generalitat.

De pie han escuchado todos ellos el himno nacional, que ha sido recibido con aplausos mayoritarios frente a los pitos que también se han escuchado, según recoge la propia agencia. Los Juegos se celebran en 16 municipios de Tarragona, con la participación de 4.000 deportistas, 1.000 jueces y representados internacionales, 3.500 voluntarios y una previsión de más de 150.000 espectadores.

Y ocho horas antes, Torra decía esto: 

"Cataluña vive un momento de excepcionalidad tremendo. Nueve personas perseguidas y privadas de libertad por dejar que los ciudadanos pudieran votar. El presidente está en el exilio, junto a otros exconsellers", aseguraba este viernes por la mañana. "Felipe VI no ha expresado ningún perdón. Hemos abierto todas las vías al diálogo. Todos los esfuerzos han venido de nuestra parte". E incluso declaró que no se haría ninguna foto con el monarca y que ningún miembro del Govern acudiría a actos convocados por la Corona. 

También anunció que no se invitará a Felipe VI a actos institucionales:  "Sin nosotros los Juegos del Mediterráneo no se hubieran celebrado", declaró. "Exigimos diálogo y dignidad. Queremos dignidad y no desprecio. Queremos que se respete la dignidad del pueblo de Cataluña". "No iré a hacerme ninguna foto con el monarca. Vivimos una situación muy grave y no queremos fotografías", subrayó el presidente catalán.