Moscú, 21 sep.- La Justicia rusa condenó hoy a tres cabezas rapadas a penas de prisión tras hallarles culpables del asesinato en 2009 de dos extranjeros en la ciudad siberiana de Irkutsk, informó una portavoz del tribunal.
El líder de la banda xenófoba, Yevgeni Panov, fue condenado a 18 años de cárcel, mientras que sus cómplices, Andréi Zaslavski y Ilyá Skliánov, lo fueron a 9 y 6 años respectivamente.
Otro miembro del grupo extremista, Vadim Dúdnikov, será juzgado por separado ya que está sometido a un tratamiento médico, explicó Olga Shindáyeva, portavoz del tribunal, citada por las agencias rusas.
Skliánov recibió una pena menor que los demás miembros del grupo ya que en el momento de cometer los asesinatos era menor de edad, según la portavoz.
Además, Panov y Skliánov serán privados de libertad durante dos años tras haber cumplido sus respectivas penas de prisión, precisó.
Según la fiscalía, el 28 de septiembre de 2009 los extremistas golpearon hasta matarlo a un ciudadano de la república centroasiática de Kirguizistán y un mes más tarde también asesinaron a otro inmigrante procedente de Uzbekistán.
Durante la vista judicial los procesados no negaron su culpabilidad, salvo Zaslavski, que la admitió parcialmente al declarar que no tenía la intención de quitar la vida a los fallecidos, dijo Shindáyeva.
En Rusia existen numerosos grupos extremistas que atacan periódicamente a inmigrantes procedentes del Cáucaso y de Asia Central, miembros de movimientos juveniles alternativos y representantes de minorías sexuales.
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