Carreteras, estaciones y polígonos: así paralizarán los CDR la economía catalana

  • El Ministerio del Interior estudia el envío de algunas unidades antidisturbios a Barcelona para garantizar la seguridad del gabinete de Sánchez.
Carreteras, transportes y polígonos: así buscan paralizar la economía los CDR
Carreteras, transportes y polígonos: así buscan paralizar la economía los CDR
EFE

Tres grupos de independentistas radicales se están organizando para colapsar la economía de Cataluña a partir del 21 de diciembre, el día en el que el Consejo de Ministros celebrará una reunión marcada en rojo en Barcelona. Quieren "tomar las calles" y están llamando a acciones de boicot contra diferentes sectores. "Ha llegado el momento de que nos organicemos y paralicemos el país de cabo a rabo", proclaman en mensajes internos que están circulando entre sus cabecillas.

Son tres grupos los que están monopolizando el diseño de las acciones de boicot. En primer lugar, los Comités de Defensa de la República (CDR), elementos violentos, organizados y estructurados orgánicamente que ya han provocado sensibles daños económicos al paralizar carreteras o abrir los peajes en plena operación retorno del puente de la Purísima. Junto a ellos se sitúan los Grups Autonoms d'Accions Rapides (GAAR), que de momento no han provocado acciones de protesta pero que ya han avisado con alentar el caos. Y, en tercer lugar, los promotores de 'La gran aturada 21-D', que buscan participar en la acción política a través de lo que ellos llaman la "huelga de país".

Los CDR levantan los peajes de varias autopistas en Cataluña
Los CDR levantan los peajes de varias autopistas

La Información ha tenido acceso a mensajes que se están intercambiando estos tres grupos que amenazan con paralizar Cataluña. Son individuos identificados por las Fuerzas de Seguridad que buscan realizar "pequeñas acciones que ocasionen grandes problemas", explican fuentes policiales. Quieren parecerse, además, a los 'chalecos amarillos' franceses. Esta es su consigna: "Nuestra organización está pensada para no tener que recibir órdenes ni directrices de nadie, de modo que si un grupo cae, los otros seguirán efectuando sus acciones de manera independiente". Idéntica estrategia a la desplegada durante los últimos cuatro fines de semana en las calles de París.

"Paralizar los grandes ejes de comunicaciones"

En esos mensajes, los radicales promueven acciones con el objetivo de "paralizar los grandes ejes de comunicaciones de Cataluña con los países vecinos (Francia y España) mediante el boicot y el sabojate". Sus prioridades son: "Los vehículos y las carreteras; las vías de tren, metro y tranvía; los polígonos industriales; las fuerzas del orden; y las comunicaciones por cable". Boicoteando estos núcleos piensan que podrán paralizar la economía catalana en un viernes tan señalado y a escasas horas de la Nochebuena.

En otra comunicación enviada por los GAAR a sus simpatizantes se asegura que "son muchas las voces que se escuchan pidiendo una huelga general y un paro de país". A su entender, "ha llegado el momento de detener el país de cabo a rabo. El pueblo catalán da un paso adelante y convoca a todas las personas independentistas a unirse a los GAAR. Votamos independencia, no autonomía".

Fuentes del Ministerio del Interior han reconocido que ya se está estudiando la preparación de un dispositivo especial que contempla el envío de varias unidades de antidisturbios a Barcelona para garantizar la seguridad durante el Consejo de Ministros del día 21, si bien no se ha cerrado del todo el proceso. 

Los radicales ya cuentan con hasta 6.000 voluntarios capaces de poner en práctica estas acciones de boicot en un viernes laborable, tal y como se publicó en estas páginas. El llamamiento se está realizando a través de grupos de WhatsApp y los organizadores de esta campaña de boicot aspiran a llegar hasta los 20.000 colaboradores. Es un diseño muy parecido al que emplearon el primero de octubre 2017 para organizarse y llevar las papeletas y urnas a los centros de votación sin que fueran interceptadas por la Policía Nacional y la Guardia Civil.

Hay que recordar que la Asamblea Nacional Catalana (ANC) también ha pedido a sus seguidores que se reserven el 21 de diciembre porque "la dignidad vuelve a la calle". La entidad independentista no precisa aún en que consistirá la protesta, aunque sí avisa de que no será "ni hacer un círculo, ni un lazo de luz". En el cartel en el que se anticipan las movilizaciones, la ANC critica que trasladar la reunión del consejo de ministros a Barcelona es el símbolo de que "el Estado opresor visita la colonia un año después de la victoria independentista en unas elecciones impuestas".

El Gobierno envía tres cartas al Govern

Mientras los radicales planean el boicot al consejo de ministros en Barcelona, el Gobierno de Sánchez mira con preocupación hacia los movimientos que está realizando Quim Torra y sus consejeros. De momento este lunes han sido remitidas tres cartas desde la vicepresidencia del Gobierno, el Ministerio del Interior y el Ministerio de Fomento a la vicepresidencia del Govern y los responsables del ramo en Cataluña.

Carmen Calvo recuerda en su misiva a Aragonès que "todos somos conscientes de nuestras respectivas obligaciones para evitar este tipo de sucesos [en referencia al boicot desplegado en los últimos días y la pasividad de la Generalitat] y habla de una aparente "dejación de funciones". Ábalos, por su parte, remarca ante Calvet lo ocurrido en las autopistas de peaje, donde los CDR levantaron las barreras. Grande-Marlaska, por último, insiste a Buch que esos mismos hechos constituyen "una grave perturbación del orden público y de la seguridad del tráfico".

Mostrar comentarios