Un fotógrafo resulta herido durante las protestas en Caracas

Un fotógrafo de la agencia Efe en Venezuela resultó hoy herido leve tras recibir el impacto de perdigones disparados por personas armadas desde un edificio en el este de Caracas.

El ataque ocurrió cuando el coordinador de fotografía de Efe en Caracas, Miguel Gutiérrez, de nacionalidad venezolana y colombiana, cubría una protesta de opositores del Gobierno de Nicolás Maduro en la zona El Rosal, en el barrio de Chacao.

Varios sujetos sin identificar con armas largas estaban situados en un balcón de la Torre Platinum disparando hacia los manifestantes y, al advertir que eran fotografiados, dispararon contra un grupo de fotoperiodistas a pesar de que estaban alejados de los manifestantes que protestaban.

Gutiérrez, quien se encontraba con fotógrafos de varias agencias de noticias, fue atendido en el lugar de los hechos por el grupo de rescate Antonio José de Sucre de al menos una decena de heridas leves en los dos brazos provocadas por perdigones y no ha tenido que acudir al hospital.

En la Torre Platinum funciona el Ministerio del Poder Popular para el Servicio Penitenciario.

Un total de 129 periodistas, entre ellos 31 corresponsales extranjeros, han sufrido agresiones desde que comenzaron las protestas el 12 de febrero pasado, según cifras divulgadas hoy por el Sindicato Nacional de Trabajadores de la Prensa (SNTP).

Los periodistas han sufrido agresiones físicas, hostigamientos, robos de equipos de trabajo y material audiovisual durante las coberturas de las manifestaciones, muchas de las cuales han derivado en actos de violencia.

El Gobierno responsabiliza a grupos de la oposición que tilda de "fascistas" y "terroristas" de la violencia que se registra en el país desde el 12 de febrero, por lo que ha desplegado operativos policiales y allanamientos de residencias en Caracas y otras ciudades del país.

La oposición y la Iglesia católica, a su vez, han denunciado la "brutal represión de la disidencia política" y la violación de los derechos humanos de los manifestantes, así como la presencia de "colectivos armados" (grupos paramilitares) para intimidar las protestas, y han exigido su desarme.