La responsable del programa de cambio climático de WWF España, Mar Asunción, explica a lainformacion.com que desde esta tarde está siguiendo las negociaciones sobre el clima fuera del centro de conferencias. Ha cedido su acreditación a uno de sus muchos compañeros que se han quedado sin acceso al Bella Center. En total, la organización ecologista ha traído a Copenhague 140 miembros.
La avalancha de participantes ha empujado a la organización de la cumbre del clima a reducir en un tercio el número de observadores, en su mayoría ONGs. "El edificio tiene capacidad para 15.000 personas, pero hemos recibido 46.000 solicitudes. Pudimos restringir el acceso antes, pero pensé que muchas personas se cruzarían y no permanecerían al mismo tiempo dentro del edificio. Es culpa mía", ha explicado hoy Yvo de Boer, secretario ejecutivo de la oficina de cambio climático de la ONU, anfitriona de la cumbre del clima.
Pese a disculparse, se ha mantenido firme sobre la restricción de acceso al recinto de un tercio de los observadores. "Es una cuestión de seguridad", ha insistido. Las organizaciones sociales entienden que el recorte supone una "menor presión de la sociedad civil" para alcanzar un acuerdo ambicioso, explica Asunción, es decir, "vinculante y con cifras".
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