Urkullu cree que el PNV puede gobernar también en Guipúzcoa y Álava

Bilbao.- El presidente del PNV, Iñigo Urkullu, ha considerado hoy que su partido aún puede gobernar las Diputaciones de Guipúzcoa y Álava, a pesar de haber sido segunda fuerza en votos, y para lo cual hablará con otras formaciones sobre "proyectos estratégicos" y analizará la política de pacificación del Estado.

En dos entrevistas en Onda Vasca y ETB recogidas por Efe, Urkullu ha dicho que no descarta continuar gobernando en las tres instituciones forales y ha avanzado que en Guipúzcoa y Álava su partido debatirá sobre "programas" y sobre "los proyectos estratégicos" para salir de la crisis.

En las Juntas Generales de Guipúzcoa Bildu ha sacado 22 apoderados, por 14 del PNV, 10 del PSE, 4 del PP y 1 de Aralar, mientras que en las de Álava el ganador fue el PP con 16, seguido del PNV con 13, Bildu con 11 y el PSE con 9.

En ambos casos la mayoría se sitúa en 26 escaños, como en Vizcaya, donde el PNV obtuvo 22 y continuará al frente de la Diputación al ser necesario un pacto Bildu-PP-PSE para desbancarle.

Ha añadido que "influirá" también en los acuerdos "el nuevo momento político que se abre en relación a la pacificación, donde aún hay muchos pasos que dar" y, en éste aspecto, el PNV "tendrá presente lo que suceda en el Estado español".

Ha comentado que la Ejecutiva del PNV realizará en su reunión ordinaria de esta tarde un primer análisis de los resultados electorales y ha afirmado que esos datos "clarifican el panorama" político de Euskadi, ya que se ha reflejado la existencia "de una mayoría social abertzale y nacionalista" y por lo tanto, ha argumentado, "el tiempo que se nos abre debe ser gestionado de otra manera".

Ha pedido a PSE y PP que sean "conscientes" de que "la suma de ambos", que mantiene el Gobierno vasco, "no representa la fotografía socio-política vasca" sino que "responde al pasado".

Así, Urkullu ha afirmado que "es difícil pensar" que un lehendakari o un Ejecutivo "puedan mantenerse sin que realmente estén representando a la mayoría social".

También ha analizado que Bildu ha aglutinado "el voto del victimismo" de quienes en otras ocasiones no pudieron presentarse a las elecciones y "el voto de castigo a otras formaciones".

Además, ha analizado que "Bildu ha tenido el beneficio del voto por reforzar su apuesta por las vías exclusivamente políticas".