Viceministro mexicano deja cargo tras orden de detención por compra de votos

  • El subsecretario de Gobernación (Interior) mexicano Arturo Escobar, que asumió el viceministerio en septiembre pasado, decidió separarse de su cargo después de que la fiscalía general pidiera su detención por presuntamente haber comprado votos como dirigente del polémico Partido Verde.

Pese a negar las imputaciones en su contra, el hasta ahora subsecretario de Prevención y Participación Ciudadana anunció la noche del miércoles que decidió separarse del cargo "con el objetivo de facilitar el adecuado curso de las investigaciones y contribuir a que el proceso se conduzca con absoluta transparencia".

"Rechazo las imputaciones en mi contra y expreso mi plena confianza en que se esclarecerán los hechos y se confirmará mi inocencia", manifestó Escobar en una breve carta compartida en su cuenta de Twitter donde aseguró que, hasta ese momento, no había sido requerido por ninguna autoridad.

Su anunció se produjo poco después de que la fiscalía general, a través de la fiscalía especializada para la atención de delitos electorales (FEPADE), informara en un comunicado que había ordenado la detención de un "dirigente de un partido político" acusado de un presunto delito electoral por "aportaciones en dinero y en especie" para condicionar los votos.

En un plazo máximo de diez días, un juez penal deberá decidir si ordena o niega la orden de aprehensión en su contra, precisó la FEPADE la noche del miércoles.

Escobar, que hasta septiembre era diputado federal y antes senador, reconoció al periódico El Universal que firmó contratos con establecimientos comerciales para ofrecer vales de descuento a sus potenciales votantes en las pasadas elecciones legislativas de junio.

Intelectuales y organizaciones mexicanas rechazaron el nombramiento del ministro en septiembre por los abusos de su partido en materia de publicidad durante recientes campañas electorales.

El Partido Verde es un socio clave en el Congreso para el Partido Revolucionario Institucional (PRI) del presidente Enrique Peña Nieto debido a la ligera caída de votos del partido oficialista y el fuerte crecimiento del Verde.

Con un controvertido programa a favor del 'fracking' o la cadena perpetua, el Partido Verde fue sancionado por las autoridades electorales con más de 30 millones de dólares por diversas irregularidades, muchas de las cuales relacionadas a sus abusos en publicidad y a usar mecanismos prohibidos como descuentos en comercios a sus votantes.

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