Wanda cierra su oficina en Madrid y deja en el aire la reforma del edificio España

    • El grupo inversor chino iba a construir en el rascacielosalrededor de 300 viviendas, un hotel de más de 20.000 metros cuadrados y un centro comercial de cinco plantas.
    • El Ayuntamiento de Madrid había exigido que se respetase la fachada del mítico inmueble, por lo que la firma ha desistido de continuar con el proyecto.
Edificio España
Edificio España

El mítico Edificio España finalmente no será reformado. Al menos por ahora. El grupo inmobiliariochino Dalian Wanda ha renunciado a la rehabilitación de este rascacielos, uno de los más característicos de la Plaza España. Wanda lo había comprado en julio de 2014 y, en principio, planeaba convertir el inmueble en un centro comercial y hotel de lujo. Pero todo ha quedado en el aire.

El grupo ha anunciado que cierra sus oficinas en Madrid y renunciará al proyecto. Actualmente, trabajaban en el mismo unas 20 personas (entre arquitectos, ingenieros técnicos, personal de marketing y comercial). Sin embargo, la firma china ha dado marcha atrás a la decisión.

El magnate y dueño de la compañía,Wang Jianlin, ha desistido de la reforma un mesdespués de que el Ayuntamiento de Madrid obligase a su grupo inversor chino a mantener la fachada durante el proceso de reforma debido a su valor histórico, algo que no había previsto el magnate y que encarecía la operación en torno a 100 millones de euros.

A lo largo de las próximas horas se podría conocer si el edificio sale nuevamente a la venta. El edil de Desarrollo Urbano Sostenible del Ayuntamiento, José Manuel Calvo, ha asegurado que la decisión de Wanda implica un abandono emprendido de manera "unilateral" y que revelaría su "irresponsabilidad" y su "poca fiabilidad" como inversor.

La decisión se ha tomado presumiblemente ante las dificultades técnicas de una obra en la que la Comisión Local de Patrimonio Histórico (que preside y controla la Comunidad de Madrid, del Partido Popular) le había obligado a conservar intactas las fachadas por su valor histórico y simbólico para la ciudad.

Wanda había comprado el edificio al Banco Santander por 256 millones de euros en 2014. El plan del inversor chino era construir en el rascacielos, de 117 metros de alturas, alrededor de 300 viviendas, un hotel de más de 20.000 metros cuadrados y un centro comercial de cinco plantas.

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