¿Y si el Gobierno de Rajoy hubiera destapado el 'Caso Rato'?

Iba a ser un jueves normal, pero la detención del exvicepresidente económico Rodrigo Rato puso en alerta a Génova y a parte de Moncloa. Los principales dirigentes del partido se enteraron por la prensa cuando estaban celebrando reuniones en sus despachos y los primeros comentarios sobre una posible filtración señalaban a uno de los suyos. ¿Podría ser?En concreto, los comentarios de algunos cargos populares señalaron al ministro de Economía, Luis De Guindos, a través del Servicio de Prevención de Blanqueo de Capitales. El Sepblac es un organismo dependiente del ministerio de Guindos que persigue las operaciones sospechosas de la banca. Con motivo de la amnistía fiscal aprobada por el Gobierno de Mariano Rajoy (que se llamó 'declaración tributaria especial') permitió que evasores y defraudadores fiscales regularizaran su situación (de marzo a noviembre). Abonaron un 10% sobre la renta no prescrita.Sin embargo y a posteriori, la Agencia Tributaria remitió a este organismo los expedientes de 705 contribuyentes sospechosos de haber lavado dinero negro. Entre ellos, Rodrigo Rato.¿Por qué ahora?"Era una bomba a punto de explotar, pero no se puede decir abiertamente porque la Justicia es independiente y el Gobierno no puede manejar los tiempos. Es sospechoso que en plena campaña electoral salga todo, sí, huele mal", señalan las mismas fuentes.Algunos barones han pedido al Ejecutivo cabreados que al igual que ha salido el nombre de Rato, que pidan los nombres de otros responsables políticos. Desvelando que en la famosa lista podrían encontrarse nombres de altos cargos del PSOE.Las quejas hacia el ministro de Economía es que "está más fuera que dentro del Gobierno", debido a su posible nombramiento como presidente del Eurogrupo. De Guindos fue Secretario de Estado de Economía en el último gobierno de José María Aznar (2002-2004), subordinado de Rato y el encargado de la redacción de la parte económica del programa electoral del PP en esos años.Las relaciones eran buenas, sin embargo Bankia abrió un frente. Ambos querían estar presidiendo la entidad y, finalmente, ganó Rato. De Guindos por su parte, consiguió la atención de Rajoy y el presidente confió en él nombrándole ministro en su Gobierno.Mientras Rato estaba siendo detenido, su compañero y ministro se encontraba en Washington tras participar el miércoles en una reunión con inversores en Londres. Según la agenda oficial del Gobierno, estaba previsto que el ministro de Economía participase en la Asambleas de Primavera del FMI.Algo que iba a explotar al PP en las narices, más pronto que tarde y sin embargo, basta con una reunión express para cambiar de estrategia y salvar el partido. La gran apuesta para evitar males mayores.Rajoy vuelve a cambiar de estrategia para ganar el 24MEl problema ha ensuciado de lleno al partido del Gobierno, pero 'a la vejez viruelas' o ese parece ser el plan de los populares para no tirar la toalla. El caso Rato ha obligado a Rajoy a modificar una vez más, tras el cataclismo andaluz, la estrategia electoral del PP ante el 24-M. Pero, ¿seguro que no estaba estudiado?
Así, el partido de Rajoy prepara a todos sus candidatos para enviar un mensaje con fuerza ante la corrupción y marcando distancia de "esas personas que ya no pertenecen al partido". Para ello, Rajoy seguirá con su táctica de acompañar a los candidatos a todos los mítines que "su agenda se lo permita" para resaltar las medidas de lucha contra el fraude fiscal, aportando datos concretos y demostrar lo que ya ha hecho el Ejecutivo."Tenemos que dar ejemplo de eficacia frente al fraude y tenemos que ser los mayores defensores de la ley ante la corrupción", revelan fuentes populares que será el 'mantra' a seguir. A la vez que el resultado de estas investigaciones es porque la Justicia funciona en este país. Lo escucharemos a partir de ahora.El mensaje positivo de los suyos

El presidente de la Xunta de Galicia, Alberto Núñez Feijóo, preguntado sobre la situación actual de Rato, ha destacado que el mensaje es "claramente positivo" ya que demuestra que "no hay excepciones" ante un posible incumplimiento de la norma tributaria. Asimismo, ha dicho que queda acreditado que el Gobierno de Mariano Rajoy "no tiene compromisos más que con la ley y con los españoles".

Por su parte, la presidenta de Castilla-La Mancha, María Dolores de Cospedal, no se ha referido explícitamente a Rato pero en un acto en Toledo celebrado horas después del registro de propiedades del exministro subrayó que "la sociedad demanda justicia, igualdad para todos, rapidez y eficacia".

Desde Castilla y León, el presidente Juan Vicente Herrera, que tampoco citó a su excompañero de partido Rato, recalcó que en política se vive un "momento especialmente complicado" en la actualidad por los escándalos de corrupción que sacuden "en personas que decepcionan".

Por su parte, el presidente de Cantabria, Ignacio Diego, hizo hincapié en que con el caso Rato "comienza el fin de una etapa de corrupción": "El que tenga la tentación tiene que tentarse la ropa a partir de ahora y saber que el Estado de Derecho, que los Gobiernos, toman en serio el problema de la corrupción y toman medidas como las que estamos viendo", remachó.

"Decepcionado" también se ha mostrado estos últimos días el presidente del PP en Andalucía, Juanma Moreno, quien ha enfatizado que el Gobierno "ha puesto a disposición de las investigaciones policiales todos los medios, toda la información y los expedientes". "Lo que demuestra esto, refiriéndose a la detención de Rato, es que da igual cómo te llames o tu trayectoria política", ha puntualizado.

Pedro Sanz, el presidente del Gobierno de La Rioja, ha dicho estar tranquilo ya que, a su juicio, el Gobierno central no distingue a la hora de actuar dentro de sus competencias, "afecten a quien afecten". En esta misma línea se ha pronunciado el candidato del PP a la Presidencia de Murcia, Pedro Antonio Sánchez, que cree la detención de Rato demuestra la operatividad del Estado de Derecho al mismo tiempo que sostiene que la detención de su excompañero de partido "no es una buena noticia".

Según parece solo hay alguien preocupado por los resultados de mayo, la presidenta del PP de Madrid y candidata a la Alcaldía, Esperanza Aguirre, teme que lo acontecido en las últimas horas con el exministro sí vaya a perjudicar al PP y "mucho".