Zapata admite que irene villa le ha dado una lección de dignidad y generosidad

El concejal de Fuencarral-El Pardo y Villaverde del Ayuntamiento de Madrid, Guillermo Zapata, reconoció hoy que Irene Villa ha dado a todos, y a él en particular, "una lección de generosidad, una lección de dignidad".
Zapata, que convocó apresuradamente una rueda de prensa para “celebrar” el archivo de la causa abierta contra él en la Audiencia Nacional por supuesta “humillación a las víctimas del terrorismo”, empezó diciendo que la decisión judicial no modifica su dimisión como delegado del Área de Cultura, previa a la denuncia de la asociación Dignidad y Justicia.
Según argumentó, su dimisión se debió a una causa ética, al haber causado dolor a las personas o colectivos mencionados en sus tuits de humor negro, que tenía que hacerse extensiva a su posible nombramiento como portavoz de Ahora Madrid en la Comisión de Cultura; según su versión, su presencia no sería "coherente" con su salida del área y sólo metería ruido, y su nombre en seguida se descartó para el cargo. “La decisión está perfectamente bien tomada y esto no lo cambia”, subrayó. “Es una decisión absolutamente meditada, absolutamente compartida”.
Su primer agradecimiento fue a Irene Villa por “su compromiso” y “la manera de haber abordado esta situación, y por un montón de años en que ha sido una de las voces de las víctimas del terrorismo”. “Nos ha dado, y a mí desde luego, una lección de generosidad, una lección de dignidad”, admitió, antes de agradecer también las muestras de cariño de otros políticos, concejales y allegados a los que no nombró.
Sobre el pleno extraordinario que se convocará el jueves 9 a petición del PP sobre el odio en la ciudad de Madrid, claramente a consecuencia de los antiguos tuits que se divulgaron de algunos concejales del Gobierno, Zapata se limitó a reconocer que el Grupo Popular "tiene derecho" a solicitar un pleno extraordinario sobre cualquier tema que considere de interés.
A una pregunta sobre los tuits críticos que ha recibido Villa por haber perdonado los tuits de Zapata y no haberse sentido ofendida, contestó que él no se siente “la persona más adecuada para opinar sobre esos asuntos”, pero que le “duele que alguien pueda pensar que Irene Villa es cómplice de algo”.
Zapata insistió en que, pese a lo que pudieron traslucir los tuits, él no es una persona antisemita, violenta ni agresiva; que condena la violencia profundamente, la terrorista etarra o cualquier otra, y expresó su solidaridad “absoluta” con las víctimas. Pero se reafirmó en su compromiso con un proyecto colectivo como Ahora Madrid y con el momento histórico en que a su juicio se debe, lo que en su opinión justifica de sobra que se haya apartado como concejal encargado de Cultura.