Zelaya solo logró romper el bipartidismo en el Parlamento de Honduras

  • El expresidente de Honduras Manuel Zelaya no pudo llevar a su nuevo partido al poder, con su mujer como candidata presidencial, pero logró romper un centenario bipartidismo en el Parlamento, del que él será parte como diputado.

Germán Reyes

Tegucigalpa, 14 dic.- El expresidente de Honduras Manuel Zelaya no pudo llevar a su nuevo partido al poder, con su mujer como candidata presidencial, pero logró romper un centenario bipartidismo en el Parlamento, del que él será parte como diputado.

La esposa de Zelaya, Xiomara Castro, candidata presidencial del izquierdista partido Libertad y Refundación (Libre), perdió las elecciones del 24 de noviembre pasado frente al candidato oficialista Juan Orlando Hernández, del conservador Partido Nacional, según los resultados oficiales del Tribunal Supremo Electoral (TSE).

La derrota sufrida por Libre, que no reconoce los resultados oficiales en la fórmula presidencial alegando fraude, supone un fracaso para Castro y su marido, que promovían una Constituyente para la "refundación de Honduras".

Hernández, según el TSE, se impuso con el 36,89 % de los votos, sobre Xiomara Castro, que alcanzó el 28,77 %.

Los resultados oficiales también dan el triunfo al Partido Nacional en la fórmula para diputados ante el Parlamento con 48 escaños, mientras que Libre obtuvo 37.

Las alcaldías municipales también las ganó el Partido Nacional con 183 de las 298 que hay en el país, seguido del Liberal con 83, en tanto que Libre sumó 31 y la Democracia Cristiana obtuvo una.

Zelaya, coordinador general de Libre, alega que su partido no reconoce los resultados oficiales presidenciales porque hubo "un fraude con transparencia", del que asegura hay evidencias en centenares de actas electorales con inconsistencias.

Ante el rechazo por parte del TSE a las impugnaciones de Libre, Zelaya dijo el pasado jueves a Efe que ahora están llevando su reclamo ante la Corte Suprema de Justicia.

El rechazo de Libre a los resultados del TSE contrasta con el creciente reconocimiento internacional en América, Europa y Asia de la victoria de Hernández, un abogado de 45 años.

Además, observadores de la Unión Europea, la Organización de Estados Americanos (OEA) y el Centro Carter, entre otros, han reiterado que los comicios fueron transparentes, masivos, así como su confianza en el sistema de verificación de actas electorales ante los reclamos partidistas.

Si fuera cierto que el TSE le ha hecho un fraude a Libre en la fórmula presidencial, Zelaya estaría tomando de su misma pócima, con la que le ganó en 2005 al ahora presidente hondureño, Porfirio Lobo, según confesó el mismo exmandatario el 3 de octubre de 2008 a un canal de la televisión local en Tegucigalpa.

"El fraude es parte del sistema, o sea que aquí el que quiera participar en política o crea que va a jugar como que está en el Vaticano, mejor que se dedique a otra cosa, el desorden, el fraude y la corrupción, son parte de ese proceso y con ese gané yo, pero me atuve a él y qué iba a hacer", respondió Zelaya entonces.

El expresidente respondió de esa manera cuando el periodista propietario del Canal 36, Esdras Amado López, quien ahora también es dirigente de Libre y será diputado ante el Parlamento, le preguntó si "el fraude está legitimado en Honduras".

Zelaya llegó al poder el 27 de enero de 2006 bajo el paraguas del Partido Liberal, al que renunció después del golpe de Estado.

Haya sido o no con fraude que perdió Libre, partido que surgió tras el golpe de Estado a Zelaya del 28 de junio de 2009, lo cierto es que ha irrumpido con tanta fuerza popular que puso fin, por ahora, al bipartidismo tradicional en el Parlamento marcado por los centenarios y conservadores partidos Nacional y Liberal.

Zelaya será uno de los 37 diputados que Libre sacó en los pasados comicios, a los que concurrieron más de 3 millones de hondureños de los 5,3 millones inscritos en el padrón electoral.

Libre no sólo le arrebató diputados a los partidos Nacional y Liberal, sino que también afectó a los minoritarios partidos Democracia Cristiana, Innovación y Unidad-Socialdemócrata, y Unificación Democrática, fundados entre 1968 y 1990.

Tras el golpe de Estado también surgieron los partidos Frente Amplio Político en Resistencia, Alianza Patriótica Hondureña y el Anticorrupción, éste último liderado por el animador de televisión Salvador Nasralla como candidato presidencial.

El partido de Nasralla sorprendió en las elecciones ganando 13 de los 128 diputados que conforman el Parlamento hondureño, en el que el Partido Nacional, que en la presente legislatura tiene 71 asientos, ha caído a 48, según los datos oficiales.

Los liberales, que de 45 diputados pasarán a tener 27, han sido relegados como segunda fuerza de oposición, mientras que el Anticorrupción será tercera.

Las elecciones de noviembre pasado han sido las más concurridas de Honduras, país que retornó a la democracia en 1980 tras casi dos décadas de regímenes militares.

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