La nueva ola vacía el turismo: "Hemos caído 30 años atrás"

Líneas aéreas, hoteles, agencias, hostelería y ocio nocturno ven como la esperada recuperación del sector se resiste a llegar y amoldan el año a la vuelta de los turistas nacionales pendientes de los datos de contagio.

Las nuevas variantes del SARS-CoV-2 desafían los escenarios de la recuperación económica, sobre todo la temporada turística de 2021 a la que se aferra el sector como un clavo ardiendo. Se trata de cepas que se caracterizan por una mayor capacidad de transmisión que la originaria de Wuhan y que se han ido replicando alrededor del mundo desde su detección en 2020. Las que más preocupan son la Delta, la Alfa, la Beta y la Gamma, cuya expansión dificulta la gestión de la pandemia y urge a acelerar la campaña de vacunación en todo el globo. La primera de ellas, de origen indio, es la que está teniendo mayor impacto: en España está relevando a la Alfa, también conocida como británica. A nivel internacional, ya es responsable del 83% de las muestras del virus en EEUU y en Europa, su alarmante expansión ya ha alertado al Banco Central Europeo. La directora del organismo financiero, Christine Lagarde, ha declarado que, aunque hay que celebrar el avance en la inmunidad con las dosis, "la variante delta constituye una fuente creciente de incertidumbre".

La vuelta de las restricciones en la mayoría de CCAA por la "explosión" de casos se dio por diferentes factores que formaron un caldo de cultivo perfecto para Delta. Por un lado, miles de jóvenes no inmunizados y congregados y por otro lado un gran porcentaje de población aún no vacunada o vacunada pero con un contexto social de mayor contacto. En este sentido, Salvador Peiró, Doctor en Medicina, especialista en Medicina Preventiva y Salud Pública, además de miembro de la Asociación de Economía de la Salud (AES), opina que la apertura en verano ha sido demasiado rápida. "No tanto por las mascarillas, sino por dar muchos mensajes positivos como en los viajes de fin de curso que hacen que los jóvenes pierdan el miedo a contagiar y los mayores entienden que ya no pueden ser contagiados", apunta. El experto aclara que cabe hacer una diferencia entre el 'pinchazo' y la inmunidad, dado que todo el proceso de asimilación de la vacuna lleva aproximadamente cuatro semanas. Aún así, el escenario era el previsto al reducirse la letalidad del virus, como estimaban los epidemiólogos consultados. "En febrero morían 30 personas en Valencia, ahora una", explica Peiró. Este avance es el que también remarcan empresas turísticas, la patronal hotelera destaca que el número de ingresos hospitalarios por cada caso de Covid han descendido un 600% desde febrero.

Aún así, la eficacia de la vacuna completa, prosigue el experto, "es muy buena con todas las variantes" y reduce la gravedad de la infección. Augura que para finales de año "ya habrá escenarios más normales al haber vacunado a grandes volúmenes de población". Aunque es una previsión que responde a la gestión de los países europeos. Sin embargo, el reto sigue siendo la producción y distribución de vacunas en países subdesarrollados, puesto que a menor vacunación, mayor capacidad de transmisión y menos barreras para las miles de mutaciones de la Covid-19. Solo algunas resisten con el avance de las dosis, en los entornos en los que no, la expansión del virus amenaza a un mundo interconectado: "Se impulsa la creación de las cepas y la extensión del virus. Hay muchos sitios donde llegaremos tarde", detalla Peiró. Por tanto, en el camino a una mayor protección grupal, la incidencia de variantes como la Delta sigue generando estragos con un mayor escape vacunal. 

Algo que ha puesto en jaque al sector turístico de nuevo y también a todos los sectores de cara al público a los que les afectan las medidas como el ocio nocturno, que ya estima pérdidas de 5.000 millones de euros en España. Los hoteles, junto con las compañías aéreas, también son los principales afectados porque la incidencia al alza afecta a las reservas y a la previsión de beneficios para cubrir gastos. Una entrada de dinero que se esperaba como 'agua de mayo' en verano pero que se dificulta por "los vaivenes de la evolución de la pandemia", como detalla la Confederación Española de Hoteles y Alojamientos Turísticos (CEHAT).

La patronal, exhausta, reclama más ayudas financieras como la moratoria de pago del principal de las hipotecas, flexibilizar las condiciones de la devolución de créditos o elevar la cantidad de las ayudas directas a fondo perdido para el sector, facilitando los trámites para su concesión. Añade y recalca que conviene acelerar la vacunación, la realización de test y fomentar el pasaporte Covid. Aún así, la recuperación sigue siendo muy vaga y las pérdidas siguen siguiendo millonarias a espera por un escenario estable, que se alarga más allá de este verano. 

Por el momento, la aparición de nuevas cepas obliga a mantener la prudencia y a fomentar el turismo doméstico. Así lo afirma Sandra Carvao, Jefa de Mercado e Inteligencia de la Organización Mundial del Turismo (OWT), quien explica que a nivel global el turismo "de cercanía" se beneficia de estas tendencias. "Por ejemplo, China recupera sus niveles de turismo anteriores a la pandemia gracias a los viajes nacionales. Pero los viajes internacionales se ven muy afectados", explica.

Con los datos actuales que llegan de junio, la organización calcula que el sector ha retrocedido 30 años, que se reflejan en una pérdida de un billón de dólares. Según las pérdidas recogidas del año 2020 y las tendencias marcadas, se calculan dos escenarios: una pérdida del 63% de los turistas en el mes de julio y una previsión de perder el 75% en septiembre. Aún así, son porcentajes que no tienen nada que ver con el cierre de 2020: un 85% menos de turistas internacionales."De cara a este año es diferente, la vacunación está avanzando en muchos países aunque existen factores de incertidumbre que siempre han existido como son las nuevas variantes. Estamos en un escenario de una gran volatilidad dado que la información de la pandemia se actualiza cada dos semanas", argumenta Carvao. Las restricciones de viaje son el principal obstáculo a la recuperación del turismo internacional, y responden al 'termómetro' de la incidencia. En este momento, las fronteras internacionales se vuelven a blindar. Con el repunte de casos, por encima de 600 puntos en España, países como Alemania ya la han calificado como destino de alto riesgo. Italia ha empezado a pedir el pasaporte Covid para entrar en locales, como Francia, y Reino Unido supera los 40.000 casos diarios convirtiéndose en el país que más contagios tiene en siete días.

Aún así, Carvao destaca que Europa es el continente donde hay más mejora turística, ya que representa el 50% de los viajes internacionales debido al cierre de otros continentes como en Asia. "Aún estamos cuesta arriba, aunque haya mejoras muy localizadas. Cerramos 2020 con un 85% de pérdidas y ahora esperamos un 75%. Pero es verdad que a la hora de hacer escenarios posibles el tema de las variantes, que se ha agudizado, es muy importante a considerar", argumenta desde la OWT. Destaca la excepcionalidad y la coordinación europea con el reparto de fondos,  las ayudas al sector, "que han sido siempre rápidas", y sobre todo, el pasaporte Covid. Por último, afirma que el gran reto sigue siendo el mismo: que las vacunas lleguen a todos los rincones del mundo.