JeC afirma que "la solución al botellón no puede ser su prohibición" y aboga por incluir otras actividades

Así lo ha indicado este jueves en una nota Pilar Martínez, representante de JeC en la Mesa Local de la Juventud donde, según ha añadido, el concejal Manuel Heras (PP) afirmó este miércoles que la fiesta de la primavera, prevista para el día 6 de abril, va a ser prohibida este año.

Además, el edil propuso "contactar con discotecas privadas para que abran más temprano" como "una de las ingeniosas alternativas" al macrobotellón de primavera que se viene celebrando cada año; lo que sugiere que el interés del PP "no está tanto en que no se produzcan casos de intoxicación etílica", sino que "no sea en un espacio municipal".

Frente a ello y la decisión "equivocada" de la prohibición, ha apostado por mantener la fiesta de la primavera, "pero incluyendo otro tipo de actividades que diversifiquen la oferta a los y las jóvenes que utilizan este espacio como lugar de encuentro y esparcimiento, para combatir más eficazmente el consumo excesivo de alcohol".

"La solución al problema del consumo de alcohol pasa por ofrecer otro tipo de actividades dentro del recinto donde cada año se celebra el botellón: conciertos de bandas locales, puestos de comida, pequeños espectáculos y otras actividades que permitan la participación de los jóvenes pero abriendo el abanico de posibilidades ante un evento como este y sugerir otros motivos, además del alcohol, por los que acudir a la fiesta", ha considerado.

Junto a ello, ha valorado las propuestas de actividades dirigidas al ocio que se han puesto encima de la mesa, pero ha matizado que "la mayoría no son del interés" de los jóvenes "no sólo por sus contenidos sino porque todas se realizarían fuera del lugar donde se celebra la fiesta de la primavera".

Por otro lado, ha manifestado que "el argumento de Heras de que la mayoría de jóvenes que acuden al macrobotellón tienen edades entre doce y 14 años no es real", ya que según los datos ofrecidos el año pasado, de los 6.000 jóvenes que acudieron a la fiesta de la Primavera, la mayoría tenían entre 17 y 22 años.

Desde JeC se ha afirmado que es cierto que en este tipo de eventos se comenten excesos por parte de muchos adolescentes, pero ha incidido en que no se resuelve trasladando el problema a otras zonas de la ciudad, que es lo que ocurrirá si se prohíbe, ni mucho menos recurriendo a fiestas privadas, entre otras cosas porque esta no es la función un organismo público como el Ayuntamiento.

"La institución debe ofrecer alternativas que combinen la información sobre las consecuencias de los excesos de alcohol, la seguridad de los y las que acudan y otro tipo de ocio que combine y complete la presencia de alcohol en la fiesta", ha dicho Martínez, para la que, además, una decisión como ésta debe tomarse con más tiempo y hablando con el máximo de colectivos afectados que pueden ofrecer soluciones y alternativas reales "y no en una Mesa Local, sin información previa y sin consenso".

La representante de JeC ha puesto como ejemplo la decisión que en su día tomo Granada de prohibir el macrobotellón, agregando que "no sirve, tal y como afirma la propia Policía Local", puesto que lo que ha ocurrido "es que se están produciendo pequeñas concentraciones de jóvenes en muchas zonas de la ciudad".