EL RETORNO SE COMPLICA CON GRANDES ATASCOS HACIA MADRID, BARCELONA, VALENCIA Y BILBAO

- Retenciones de hasta 32 kilómetros para volver a Valencia. La operación retorno de la Semana Santa era algo complicada a las 19.00 horas de la tarde de este lunes en carreteras en dirección a grandes ciudades como Madrid, Barcelona, Valencia y Bilbao, que registraban atascos kilométricos por la gran cantidad de vehículos en los que viajaban ciudadanos que apuraron hasta el último momento sus días de descanso por la Semana Santa.
Según los datos de la Dirección General de Tráfico (DGT) sobre el estado de las carreteras, recogidos por Servimedia, las carreteras afectadas por los atascos se encontraban en 13 provincias: Barcelona, Burgos, Cantabria, Castellón, Girona, Jaén, Lleida, Madrid, Murcia, Sevilla, Tarragona, Valencia y Zaragoza.
En las entradas a Madrid, había dificultades circulatorias en la A-1 (dos kilómetros en Alcobendas y otros tres ya en la capital), la A-2 (2,5 kilómetros en la capital), la A-3 (ocho kilómetros en Arganda del Rey y dos en Rivas-Vaciamadrid), la A-4 (cuatro en Pinto), la A-5 (uno en Getafe, tres en Móstoles, cinco en Navalcarnero) y la A-6 (ocho en Pozuelo de Alarcón y cinco en Las Rozas). En dirección en Madrid, pero desde Jaén, había atascos en dos tramos de tres kilómetros de la A-4 a la altura de Santa Elena.
En Barcelona se registró tráfico lento a las 19.00 horas en tres tramos de la AP-7 en dirección a la capital catalana (7,5 kilómetros en El Vendrell; seis en El Papiol y tres en Vilafranca del Penedés), así como dos en la A-2 (cinco en Odena y tres en Esparreguera), uno en la C-31 (1,5 en Sitges) y otro en la C-32 (cuatro en Sitges).
También dirección a Barcelona y en otras provincias, algo similar ocurría en Castellón (seis kilómetros de la AP-7 en Benicarló y cuatro de la AP-7 en Santa Magdalena de Pulpis), en Lleida (10 kilómetros de la A-2 en Vilagrassa), en Zaragoza (un tramo de tres kilómetros y otro de cinco de la A-2 en la capital aragonesa) y en Tarragona (la AP-7 en El Vendrell, con un tramo de 7,5 kilómetros y otro de 4,5, y en la N-340, con cuatro kilómetros en Barri Maritim de Coma-Ruga).
Algunos accesos a Valencia también registraban complicaciones circulatorias, concretamente en la A-3 (32 kilómetros en Requena y 1,5 en Riba-Roja de Turia, 12 en la A-35 en Vallada y dos en Alboraya). Lo mismo ocurría en Cantabria hacia Bilbao, con dos tramos congestionados en la A-8: uno de nueve kilómetros en Ontón y otro de cinco en Hazas de Cesto.
También en dirección al norte había atascos en carreteras de Burgos (6,5 kilómetros de la A-1 en Castañares; seis de la AP-1 en Briviesca, dos de la AP-1 en Rubena y 10 de la N-I en Monasterio de Rodilla). Murcia tampoco se libraba de los atascos (seis de la A-30 en la capital murciana hacia Albacete), al igual que Girona (cinco en Llagostera hacia la costa).
VEINTIDÓS MUERTOS
Por otro lado, un total de 22 personas han perdido la vida en las carreteras españolas desde las 15.00 horas del viernes 7 de abril hasta las 24.00 del domingo 16, en el marco del dispositivo especial de la DGT con motivo de la Semana Santa, que concluye en la medianoche de este lunes.
Fuentes de la DGT informaron a Servimedia de que en lo que va de dispositivo especial de la Semana Santa se han producido 22 accidentes de tráfico mortales, en los que han fallecido 22 personas y otras 18 han resultado heridas y fueron trasladadas a hospitales.
A falta de que la operación de Tráfico termine este lunes, el día más trágico fue el jueves 13 (seis fallecidos), seguido del domingo 9 (cuatro), los dos sábados (tres), los dos domingos (dos) y el martes, el miércoles y los dos viernes (uno), mientras que el lunes no hubo ningún accidente mortal.
La Semana Santa del año pasado acabó con 41 fallecidos en 28 accidentes mortales, la cifra más alta desde 2012. A ese incremento de la siniestralidad contribuyó principalmente el accidente de un autocar en la AP-7 a la altura del término municipal de Freginals (Tarragona), en el que murieron 13 personas.