La iniciativa se enmarca en el programa '0,7 Una Nau de Solidaritat' de la UV, dirigido por el profesor Javier García Gómez, y que ha cerrado recientemente una de sus fases. Los interesados en participar en el viaje podrán conocer más detalles en una reunión el próximo miércoles 15 de febrero a las 18:30 horas en el edificio de los Institutos de Investigación del Campus dels Tarongers de Valencia, según ha informado la institución universitaria en un comunicado.
La comunidad nativa quechua de Chirikyacu, enclavada en la selva amazónica del Perú, está intergrada por solo 400 miembros y se trata de una zona "muy deprimida económicamente, con altos niveles de desnutrición y de analfabetismo", como ha destacado el responsable del proyecto de cooperación universitaria.
Además, este entorno "sufre una importante y peligrosa deforestación debido a la agricultura extractiva, que es el principal medio de vida de la población indígena". Al respecto, ha indicado que el impacto ambiental de esta práctica "está repercutiendo en la disminución de caudales de la cuenca", lo que ha alertado a la organización del proyecto, que en 1998 inició los trabajos de colaboración mediante un convenio con la Universidad Nacional de San Martín, en Perú.
Tras varias fases, este programa ha construido un albergue para atender en la zona al turismo como motor económico alternativo que "evite en lo posible la deforestación". "Siempre hemos pretendido plantear alternativas económicas orientadas al desarrollo turístico sostenible para mejorar las condiciones de vida de la población y la salubridad de la zona", ha apuntado el profesor.
UNA 'CASA DE VALENCIA' EN PERÚ
El albergue, al que los nativos han otorgado el nombre de 'Valencia wasi' (Casa de Valencia), será el destino de los voluntarios que realicen el viaje solidario durante el próximo verano. Allí podrán conocer y relacionarse con la comunidad nativa y llevarán a cabo trabajos de mejora de las instalaciones, como pintura, pequeñas reparaciones, trabajos agrícolas o talleres de artesanía, entre otros. En los espacios de ocio, los cooperantes también visitarán lugares de interés patrimonial.
Este proyecto de cooperación tiene el objetivo de convertirse en una "alternativa a la explotación de los valiosos recursos naturales de la zona", según el responsable, para mejorar la calidad de vida de los nativos a través de la potenciación del turismo y de la realización de actividades productivas sostenibles.
Así, en el marco de la IV Convocatoria del programa '0,7' se han realizado actuaciones de capacitación en materia medioambiental, de turismo y de salud, y se ha construido una granja de cuyes o conejillos de Indias y gallinas. También se han elaborado fichas de productos turísticos y trípticos informativos que se han difundido en la última feria del turismo celebrada en Lima (Perú) en noviembre del año pasado.
Para próximas etapas, Javier García Gómez ha expresado su voluntad de continuar con las actuaciones de cooperación universitaria en esta zona. "Es muy importante que el proyecto se consolide hasta que los receptores puedan desarrollarlo sin nuestra ayuda", ha reivindicado.
LOCAL DE REUNIÓN PARA MUJERES
La siguiente fase del proyecto se denomina 'Warmi Wasi' o Casa de la Mujer y se centrará en la construcción de un local de reunión que acoja a las mujeres de la zona y donde aprendan a elaborar artesanía y asistir a cursos de capacitación. La intención de la organización es que también sirva como centro de difusión de la cultura a través de la instalación de una biblioteca.
El profesor fue galardonado en la pasada edición de los Premios Manuel Castillo de investigación y periodismo para la paz y la cooperación, organizados por el entonces Patronat Sud-Nord de la Fundació General de la Universitat de València.
El programa '0,7 Una Nau de Solidaritat', que convoca el Vicerrectorado de Internacionalización y Cooperación con el apoyo de la Fundació General de la UV, está dirigido por la Comisión 0,7 creada en 1995 con la misión de establecer las líneas generales de actuación en materia de cooperación al desarrollo de la institución: tanto distribuir el 0,7 por ciento del presupuesto a estas iniciativas como el 0,7 por ciento voluntario de las nóminas del personal y las tasas de matrícula de estudiantes.
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