Oribú no es uno más entre los que ofrecen una apuesta de comida asiática en Madrid

  • En la carta encontramos elaboraciones clásicas al vapor de la cocina asiática entre las que destaca una ensalada de gambón y aguacate con salsa chili.
Oribu
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Uno de los pioneros de la cocina fusión, responsable de que en Madrid se comenzará a probar auténticos platos de cocina fusión, -entendiendo por tal la combinación de elementos, productos, recetas y técnicas de la cocina oriental y mediterránea- fue Alberto Chicote en el restaurante Nodo que abrió Benjamín Calles. Tras Nodo aparecieron multitud de establecimientos con aspiraciones por entrar en la nómina de restaurantes ‘de moda’. Óscar Horcajo, un discípulo de Chicote en Nodo, fue quien agarró los mandos en la cocina en los primeros tiempos del restaurante Oribu.

Es cierto que la primera vez que probamos Oribu acudimos con cierta aprensión por la proliferación que ha habido de este tipo de restaurantes de cocina oriental en los últimos años en Madrid; pero enseguida se apagaron todas las alarmas porque tanto la puesta en escena del local como su propuesta de cocina estaban perfectamente pensadas y solucionadas. Oribu que significa oliva en japonés da pistas del discurso por el que transcurre la experiencia y que se mantiene en el mismo buen nivel que mostró en sus primeros tiempos cuando comenzó de la mano del joven chef, Óscar Horcajo.

El proyecto sigue siendo responsabilidad del joven empresario Iván, español de origen chino que con buen criterio propone una cocina de estilo oriental y base mediterránea en la que destacan por ejemplo unos muy buenos dim sum de rabo de toro. El espacio interior diseño del arquitecto Álvaro Bultó está muy bien dimensionado, dividido en tres ambientes diferentes que dan profundidad y versatilidad al local. Su decoración sillones chester y alacenas antiguas; sus ‘tres plantas’. Arriba la buhardilla mesas bajas y cómodos sillones. Abajo comedor con chimenea, estanterías y columnas vistas de hierro.

En la carta encontramos elaboraciones clásicas al vapor de la cocina asiática entre las que destaca una ensalada de gambón y aguacate con salsa chili. Un bao relleno de caldo y panceta ibérica rico; Okonomiyaki de cangrejo “Soft Shell” en tempura crujiente y huevo frito. Tacos Japo gaditanos de camarones, langostino, wakame, wasabi y guacamole. El citado y popular dim Sum de rabo de toro, patata a la crema de queso de Llanes y seta china. Un buen curry Thai rojo de langostinos tigre, leche de coco y verduritas al fuego de wok. Una pieza de secreto Ibérico al Teppanyaki japonés con mix de salsas Hanoi.

Entre otras creaciones originales y que merecen la pena ser probadas destacan el tartar de salmón atlántico y mango, aliño cítrico, chips de loto y wasabi caviar. Un maki que llaman AK-47 de atún rojo picante, espléndido. Los huevos rotos ‘tierra y mar’ de sashimi de tún rojo marinado con patatas ‘salardaise’ y un punto de trufa. El arroz oboro-chaufan con pollo de corral y huevo cocinado a baja temperatura. La hamburguesa de rabo de toro en bao con cebolla caramelizada y salsa Oporto. El lomo de atún envuelto en sésamo y hecho en la parrilla japonesa.

Oribu

 Calle Barquillo número 10
Madrid

http://oribugastrobar.com/

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