Madrid, 6 feb.- El Instituto Nacional del Consumo publicó en enero pasado 43 alertas sobre productos no alimenticios por riesgo grave para los usuarios, de las que más de la mitad correspondieron a productos eléctricos y juguetes y 22 tenían a China como país de origen.
Las autoridades rechazaron la importación de 5 productos detectados en las fronteras, en tanto que 24 fueron retirados una vez que ya estaban en el mercado, con lo que fue prohibida su comercialización, ha informado hoy el Ministerio de Sanidad, Política Social e Igualdad en un comunicado.
En los 14 casos restantes, el propio fabricante, como obliga la normativa, comunicó a las autoridades de consumo la existencia de posibles riesgos en sus productos y adoptó las medidas necesarias para paliarlos.
Después de los productos eléctricos (12) y juguetes (10), el grupo de vehículos y accesorios es el que sumó más alertas (8), "dados los requisitos exigidos" por la normativa que los regula.
En el caso de los juguetes, están sometidos, además, a una "especial vigilancia" al estar dirigidos a una población vulnerable.
A continuación se situaron vestimenta y calzado infantil, con cuatro alertas, seguidos de los accesorios para el pelo (dos alertas), equipos de protección individual, artículos infantiles y artículos de ocio/deporte, con una alerta cada uno de ellos.
La categoría de "otros", productos que no pertenecen a ninguno de los grupos mencionados, tiene cuatro alertas.
Por países de procedencia, China registra 22 del total de alertas, mientras que el origen era desconocido en 12 casos.
El resto de productos procedían de Alemania (2), España (2), Reino Unido (2), Estados Unidos (1), Lituania (1) y República Checa (1).
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