Cómo disfrutar 24 horas en una de las ciudades más fascinantes: Beijing

  • Sus más de tres mil años de historia atestiguan un pasado más sólido del que imaginamos y un futuro que ha llegado antes a esta parte del mundo.
Imagen de la Gran Muralla China en Pekín.
Imagen de la Gran Muralla China en Pekín.
Pixabay
Imagen de la Gran Muralla China en Pekín.
Imagen de la Gran Muralla China en Pekín. / Pixabay

Desde este pequeño lado del mundo en el que aún creemos que occidente es el ombligo del mundo, perdemos la perspectiva de hacia donde va el Planeta. Europa, cansada y América, descentrada; han dejado libre el camino para que un país como China y Beijing su capital, dirigidas con mano férrea pero conscientes de lo que se está jugando, sean la proa que navega a toda vela hacia una nueva era. Beijing es una ciudad que en pleno proceso de digitalización parece menos humana; pero sus más de tres mil años de historia atestiguan un pasado más sólido del que imaginamos y un futuro que ha llegado antes a esta parte del mundo.

Cámaras de seguridad con reconocimiento facial controlan las calles. Millones de rostros son escrutados y analizados comparándolos con la base de datos cada minuto. Una ciudad de comercio compulsivo que ha abandonado el dinero en favor del dinero virtual en internet; las llaves en favor de apertura de reconocimiento automáticas y donde parece que se han abandonado los cielos azules de antaño, por otros más oscuros y densos. Arquitectura internacional de Zara Hadid y Rem Koolhass, que conviven con las casas más tradicionales del barrio de Hutong donde el Este y el Oeste se fusionan.

08:00h Desayuno en The Voyage Coffe

Aunque hay varias sucursales la de Jiuxianqiao está en un barrio más acogedor en el que una parte importante de sus residentes son artistas que plasman su obra en galerías de arte como Pace o Intelligentsia. Aquí sirven buen café y algún bizcocho para desayunar.

09:00h Mercado de la seda

El nombre es tan sugerente como las gangas que pueda encontrar en cualquiera de sus más de 1.600 puestos; pero el lugar no tiene tanto glamour como sugiere el nombre. Es un edificio con más de 30.000M2.

11:00h La Ciudad prohibida

Un conjunto monumental y único. Una fortaleza, un palacio, un complejo construido durante la dinastía Ming como centro desde el cual se dirigía el universo conocido. Son necesarias unas cuantas horas para recrearse en la magnifica residencia de los emperadores chinos. No deje de visitar el Templo del Cielo.

13:30h Vistas de la ciudad

Concluya la visita a la ciudad Prohibida saliendo por la puerta de la Divinidad y suba hasta la colina Jingshan desde donde podrá disfrutar de unas impactantes vistas sobre la ciudad inmensa e inabarcable.

14:00h Para comer Country Kitchen

En el hotel Rosewood, un cinco estrellas, ofrecen cocina local, con un gran horno en el que asan uno de sus mejores platos: el pato.

16:00h Templo del Cielo

En un escenario impresionante, protegido por una muralla y unas puertas de acceso, el templo circular, único en su especie en China. Una sala circular de 30 metros de altura sostenido por 28 columnas de madera. Un interior magnífico y decorado con la máxima riqueza, impresiona cuando se visita por primera vez.

20:00h Una cena en The George

Un restaurante de cocina local pero pasada por un tamiz occidental. Lo mejor es ponerse en manos del chef y solicitar el menú degustación, ponerse en sus manos es lo más inteligente y no le defraudará. Hasta una docena de platos.

21:00 Para dormir el encantador y más acogedor hotel The Orchid que conserva la hospitalidad y amabilidad chinas.

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