Un hotel con tremendo encanto a la sombra de la medieval Sigüenza

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Alcuneza es una pedanía de la medieval Sigüenza, de la que salen y llegan estrechas carreteras locales hechas para aquellos a los que les gusta conducir. Se alza una aldea bajo el influjo de Sigüenza, una villa que en tiempos se gobernaba desde los altares y en medio de un paisaje dominado por un cielo rotundo, azul, intenso, amplio y estático que lo cubre e ilumina todo, incluso ahora en otoño. A orilla del Henares se encuentra el Molino de Alcuneza, un Relais Chateaux con tremendo encanto. Allí donde todos han emigrado a la ciudad, sólo siete vecinos siguen habitando; Juan Moreno decidió instalarse en medio de la nada, y abrir el primer hotel de la zona.

Desde hace más de quinientos años, a orilla del río, la piedra de molienda del Molino de Alcuneza convertía el grano en harina, para alimentar a toda la comarca. Hoy totalmente restaurado y operativo, es la pieza central de un hotel que nadie imaginaba hace veinticinco años. Juan tuvo la capacidad y la visión, la determinación y el acierto, para tras mucho trabajo, transformar la zona y convertir aquel pequeño molino, en un hotel que destila encanto y tranquilidad. Desde los jardines y terrazas para sentarse a contemplar el cielo azul del mediodía, a los salones con chimenea en los que leer, escuchar música, beber una copa de vino, o disfrutar de los conciertos en directo de guitarra española antes de la cena.

Excursiones para descubrir valles, ríos pueblos medievales, salinas, parques naturales y parajes de La Mancha amplios y diáfanos, en plena Ruta de Don Quijote. Actividades que  se completan con el relax, la tranquilidad, el silencio y la paz que se respira en Molino de Alcuneza. El spa, el baño turco, los masajes y la sauna se reservan de forma privativa por habitación. Es un lugar para transforman la agitación de la ciudad y del día a día, en pausa, y descanso. Hoy, Blanca y Samuel, la segunda generación de la familia Moreno Gordo, trabajan para que el descanso de sus huéspedes sea su única ocupación.

Relais Chateaux es probablemente la cadena que más cuida y prima la promoción de la cocina local, propia del lugar donde se ubican los establecimientos adheridos. De hecho, desde hace dos años ha comenzado a incorporar a su selecto club, sólo los mejores restaurantes, aquellos que al menos ostenten dos estrellas Michelin. En Molino de Alcuneza, Samuel ejerce como chef, tras haber estudiado en la Escuela de Hostelería de Teruel, y formarse junto a cocineros como Joan Roca, Sergi Arola y Joan Bosc; despliega una cocina más que notable, que sin duda raya a la altura y al nivel de sus colegas.

Samuel elabora una cocina muy bien ejecutada, equilibrada y ligera que, si mantiene la uniformidad y el listón donde lo tiene colocado, obtendrá el reconocimiento que le haga lucir soles (que merece más que alguno) y ¿por qué no? estrellas. Samuel plantea tres menús que cubren de forma más o menos extensa una interesante carta que forma a partir de una selección del mejor producto local. La bodega, que confecciona Blanca, sumiller, mantiene una impronta de vinos castellanos y manchegos interesante, de la que deriva una selección más corta pero suficiente, para tomar por copas y combinar con cada plato del menú.