Joyas 

Chopard, artesano de emociones, presenta nueva colección de alta joyería

  • La Maison presenta este año una colección de alta joyería que destaca por el valor y la variedad de sus gemas extraordinarias.
Chopard
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Un boceto para collar enmarcando esta increíble pieza con diamantes talla pera, en oro blanco ético de 18 quilates.

La alta joyería tiene su momento álgido en enero, durante las presentaciones de las grandes casas de orfebrería, en fechas coincidentes con la alta costura parisina para mayor fasto de la ciudad de la luz. Allí se reúne el espectáculo de la belleza, y una muy particular, la de las piedras preciosas, esos misteriosos tesoros que salen de la profundidad de la tierra. Pero para llegar a ese momento mágico en que se descubren al público las nuevas colecciones, hay que trabajar durante años y recorrer los cuatro puntos del planeta donde encontrar las gemas más valiosas, raras y puras. Esa es la pasión de Caroline Scheufele, copresidenta y alma creativa de Chopard. Su ojo experto es capaz de sacar a la luz piedras excepcionales.

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Arriba, en la imagen, boceto para un collar en oro blanco ético de 18 quilates, engastado con una turmalina paraiba de 34,63 quilates talla triángulo (en la imagen de abajo). El collar acoge y ensalza la excepcional turmalina con un diseño a base de turmalinas paraiba más pequeñas en talla pera y diamantes talla brillante. Pendientes en oro blanco ético de 18 quilates engastados con dos diamantes D-Flawless talla pera de un peso de 7 y 7,2 quilates y dos diamantes D-Internally Flawless talla brillante de un peso de 2,6 y 2,5 quilates, todos tipo IIA.

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Arriba en la imagen, boceto para un anillo realizado con un ópalo cabujón negro de 26,44 quilates.

Los talleres de alta joyería de Chopard, nacidos hace veinte años, reúnen bajo un mismo techo más de treinta oficios implicados en la fabricación de cada joya, tales como el tallado, la fundición de oro, las técnicas de microengaste o la escultura en cera, por mencionar solo algunas de las especialidades en que se ha de adquirir la categoría de maestro. Todo ello da idea del nivel de especialización de Chopard en su búsqueda de la perfección.

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Arriba en la imagen, boceto para un collar realizado con un diamante fancy amarillo de 33.26 quilates talla esmeralda (cuya pureza se aprecia en la imagen de abajo), arropado por diamantes talla pera y talla brillante, realizado en oro blanco ético de 18 quilates. Abajo a la derecha, Diamante camaleón 'fancy dark gray greenish yellow' talla oval de 31,3 quilates. que cambia de color con la luz y la temperatura.

La novedad de Chopard este año ha sido presentar un importante número de piedras preciosas de la más alta calidad. Y para rendir homenaje a estos regalos de la naturaleza, se han creado depurados diseños que ponen en valor la belleza intrínseca que cada una de las piedras es capaz de expresar.

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Arriba, pendientes en titanio, engastados con dos esmeraldas talla octogonal de 25,6 y 25,2 quilates, dos esmeraldas talla esmeralda de 6,4 y 6,3 quilates y esmeraldas talla brillante. A su lado, una esmeralda talla redonda de 61,79 quilates, y a la derecha un boceto para collar enmarcando esta increíble pieza con diamantes talla pera, en oro blanco ético de 18 quilates.

Para Caroline Scheufele, la vocación y el trabajo del joyero debe consistir en sacar a la luz el resplandor natural de cada gema renunciando a ornamentos superfluos. Por eso, en esta colección llamada 'Exceptionals Gemstones', la mayoría de las piedras se ha engastado en solitario, en sortijas que, a veces, se adornan sobriamente con un microengaste o con otras piedras a ambos lados, o en pendientes. Lo justo para permitir apreciar la belleza excepcional de las piedras preciosas y admirar el carácter atemporal de unas joyas imperecederas.

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