Reconstrucciones de la Oceanix City desarrollada por ‘Un-Habitat’.
Dos de cada cinco personas en el mundo viven a menos de 100 kilómetros de la costa, y una de cada diez vive en zonas costeras a menos de 10 metros sobre el nivel del mar. La gran mayoría de las áreas costeras ya se están viendo afectadas por la erosión, y las inundaciones cada vez más frecuentes están obligando a desplazarse a millones de personas, afectadas sus viviendas y las infraestructuras que las sirven.
‘Un-Habitat’ es el programa de Naciones Unidas para los Asentamientos Humanos y el desarrollo urbano sostenible, establecido en 1978. Desde entonces, junto con Oceanix, el Centro de Ingeniería Oceánica del MIT, ha convocado a investigadores, ingenieros marinos y científicos en el marco de la ONU para desarrollar ideas vanguardistas que permitan afrontar los retos que el cambio climático está planteando como amenazas inminentes para las ciudades cercanas al mar, e incluso para los territorios isleños.
Una ciudad autosostenible, que podría pasar de albergar 300 a 10.000 habitantes.
Una de las posibles soluciones a la catástrofe que se avecina es el desarrollo de ciudades flotantes autosuficientes, capaces de producir sus propios alimentos, energía, abastecimiento de agua dulce, y el objetivo de llegar a generar cero residuos. El diseño de Oceanix City, la primera ciudad flotante sostenible del mundo, concebida para albergar hasta 10.000 habitantes, fue presentado en abril por Marc Collins Chen, cofundador y CEO de Oceanix, que sostiene que los humanos pueden llegar a vivir en ciudades flotantes, en armonía con la vida submarina.
“Ya disponemos de la tecnología para vivir en el agua, respetando los ecosistemas marinos. Nuestro objetivo es que las ciudades flotantes sostenibles sean asequibles y estén disponibles en todas las áreas costeras. No hablamos de un privilegio para ricos”. Oceanix City está diseñada a prueba de inundaciones y grandes tormentas. En caso de un cambio importante en los patrones climáticos, toda la ciudad puede ser desmantelada y remolcada a una ubicación más adecuada. Nueve de cada diez de las mayores ciudades del mundo están expuestas al ascenso del nivel del mar en 2050. Oceanix City es un modelo de metrópoli marítima modular incluida en los Objetivos de Desarrollo Sostenible.
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