La maternidad de Eugenia Osborne, su "mayor éxito"

Madrid, 20 sep.- El nacimiento de Juan ha sido "un antes y un después" en la vida de Eugenia Osborne, además de su "mayor éxito", una experiencia maravillosa que le gustaría repetir y poder así dar muchos hermanos a su primogénito.

"Me encantaría tener muchos hijos, quizá cuatro", ha dicho hoy a Efestilo la hija de Bertín Osborne, que asegura que le encanta "ser madre" y se reconoce "feliz".

Osborne, embajadora de la Fundación de Tenis madrileña, ha acudido hoy con su marido, Juan Melgarejo, a la presentación de la segunda edición del Torneo Tenis Omnia Ciudad de Madrid, que comienza el sábado en el Club de Campo Villa de Madrid.

Su "actitud ante la vida" ha cambiado tras el nacimiento de su hijo Juan, que ya tiene cinco meses, así que la hija y nieta de enólogos ya no puede pasar tanto tiempo fuera de casa, pero dice estar "muy contenta".

"Ya está gateando, ha empezado pronto y tengo que estar con mil ojos", confiesa entre risas. "Se choca contra las paredes. El otro día estuvo a punto de comerse la pata de la mesa", describe gesticulando.

Preguntada sobre su concepto de felicidad, la segunda hija de Bertín Osborne, confiesa que es estar con su marido y con su hijo: "Estar juntos y disfrutar".

Y dando un salto hacia las preocupaciones, reconoce que la suya es "como la de muchos ahora", poder seguir adelante cada mes y tratar de que los suyos estén bien.

La "naturalidad" es, según ella misma, una de sus cualidades, y si tuviera que pensar en un talento que no posee, dice que le hubiera gustado heredar una buena voz. "Cantar", admite entre risas.

Eugenia Osborne lee mucho y "El jardín olvidado", de la australiana Kate Morton, es el libro que hoy tiene en su mesilla de noche, una novela en la que los recuerdos y las raíces familiares cobran una importancia vital, por eso valora mucho los vínculos emocionales.

"Creo en la amistad, es muy importante para mí", asegura, como también lo es el amor: "Es fundamental cultivarlo y esforzarse y cuidar a la otra persona, concluye.