Bajo la marca AmazonBasic, Amazon ofrece en plena campaña navideña todo tipo de juguetes. Algo que ha hecho aprovechando la caída de minoristas del tamaño de Toys R Us. En su campaña promocional, el gigante del comercio digital apuesta por el papel.
Es un tema que se lleva abordando todo el año. El sector de los juguetes está pasando por la peor de sus rachas. Tras la sonada caída de la cadena de tiendas especializada en juguetes Toys R Us, el pasado lunes, las dos jugueteras más potentes del mercado que cotizan en bolsa, caían en descensos “superiores al 4 y al 1,3%, respectivamente y acumulan recortes por encima del 15 y el 8% en el ejercicio”, según explicaba Agustín Monzón en El Independiente.
El titán del comercio electrónico, en su incisivo afán por seguir creciendo, se ha esmerado por tapar un agujero que, en estas fechas, es imprescindible y necesario cubrir. Para albergar este sector, la compañía de Jeff Bezos ha creado una sección que puedes encontrar en su web y que está destinada a la venta de juguetes. Se trata de una sección muy joven que está repleta de juguetes de terceros para niños de cortas edades. Pero con el tiempo, y como siempre hace el gigante, se espera que lleguen los juguetes de fabricación propia.
Mientras tanto, lo que quieren es crecer. Lo importante es hacerse imprescindible en un nuevo nicho. Y en esa tarea están. La idea es llegar claramente a los niños. Y qué mejor manera que acudir a lo retro. A las historias de nuestro pasado que siempre funcionan. A un catálogo de papel como los de antes. Un catálogo de papel que pulule por casa hasta el fin de las fiestas como Dios manda. Emily Dreyfuss habla de este catálogo en un artículo para 'Wire'.
El valor de un catálogo de papel
El catálogo en sí, se llama 'Holiday of Play' y tiene 68 páginas repletas de juguetes más que populares. “El catálogo se envió a millones de clientes el pasado noviembre en EE.UU., pero no sabemos el número exacto de unidades enviadas. Aunque también está disponible en Whole Foods y en algunas tiendas físicas de Amazon, o en línea en formato PDF y Kindle”, comenta Dreyfus.
El catálogo ha tenido muy buena acogida. La gente lo ama. Las críticas sobre él son en general bastante buenas. Incluso hay gente enfadada por no haberlo recibido. Verdaderos usuarios que se han sentido ninguneados por el mismísimo Amazon.
A nivel de negocio, las expectativas crecen aún más. Tener un catálogo de papel específico de juguetes en esta época del año, es un verdadero atino. Lo niños lo tienen frente a sus ojos y hace que tengan claro cuál es el juguete que quieren para esta Navidad. Un acceso realmente fácil para ellos.
Los niños no tienen una buena forma de descubrir los juguetes en el sitio web de Amazon. La sección, además, es algo confusa de navegar. “Un catálogo impreso es la forma en que Amazon puede poner su oferta directamente frente a los niños, mientras que también les da a los padres un poco más de control sobre el proceso”, asegura Dreyfus.
El competidor más directo
Pero en esto de los catálogos de juguetes, algo que históricamente lideraba Toys R Us, el gigante del comercio 'online' no está solo. eBay también ha lanzado un catálogo de juguetes de cara a estas fechas. Un catálogo que en este caso está poblado de juguetes únicos, extraños, salvajes y caros, que también se lanzaron esta temporada.
Pero para esto, Amazon ya tendrá tiempo. Por ahora solo ofrece juguetes de terceros. Juguetes que son popularmente muy conocidos. Aunque, inevitablemente, ya se habla de la esperada nueva generación de juguetes que llegarán de la mano del gigante. Algo que define bastante a la empresa de Bezos y que ya ha hecho en innumerables ocasiones con sus propios productos en las diferentes secciones.
Realmente sus competidores más directos por el tipo de juguetes que ofertan son Target y Walmart, que según los expertos, son minoristas tradicionales que llevan enviando catálogos de vacaciones navideñas desde hace muchos años. En España, claro, El Corte Inglés.
“El catálogo puede estar hecho de papel, pero está diseñado como una puerta de entrada a una transacción digital”, comenta Dreyfus. No tiene una verdadera información de precios, en su lugar encontramos códigos QR y “calcomanías que los niños pueden usar para anotar los regalos que quieren que compren sus padres”, explica. “También funciona con la aplicación de Amazon: tomas una foto del elemento del catálogo que tú (o tus hijos) deseáis, la aplicación abrirá una lista y te permitirá comprarlo desde tu propio teléfono”.
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