Bill Gates es uno de los millonarios que más esfuerzos está haciendo para acabar con la pandemia global del coronavirus. Desde el pasado abril, el fundador de Microsoft ha empezado a gastar miles de millones de euros en ayudar a encontrar una vacuna efectiva contra la Covid y en cómo prevenir contagios. De hecho, hasta la fecha ha participado en siete grandes proyectos en este sentido. Sin embargo, ante la falta de avances, el magnate ha revelado que siempre se hace a sí mismo un par de sencillas preguntas antes de tratar con problemas altamente complejos, como la crisis del coronavirus: "¿Quién ha tenido éxito abordando este tema en el pasado? ¿Y qué podemos aprender de él?".
"Desde que era adolescente, he abordado todos los grandes problemas nuevos de la misma manera: comenzando con [esas] dos preguntas. Usé esta técnica en Microsoft y todavía la uso hoy", escribía Gates en un post de su blog en GatesNotes publicado a principios de septiembre. En él, reconoce abiertamente que se trata de un proceso de dos pasos que también utiliza para encontrar la solución a la crisis del coronavirus: "Me hago estas preguntas literalmente todas las semanas cuando pienso en la Covid-19". Eso sí, aunque "parecen preguntas obvias, a veces es sorprendentemente difícil encontrar las respuestas...", señalaba el magnate.
Este proceso en dos pasos es extremadamente similar al que utiliza Sherlock Holmes en las novelas de Arthur Conan Doyle yo en las decenas de películas y series que se han realizado sobre el personaje. Eso sí, en el caso del genial detective, su prodigiosa mente funciona como una gran enciclopedia que parte de los conocimientos ya adquiridos para hacerse una idea general del problema; después, reúne pruebas para formar una hipótesis que, en última instancia, tratará de validar. En realidad, ambos procesos representan prácticamente el mismo esquema que sigue el método científico (hipotético-deductivo) y que se basa utilizar el conocimiento ya asentado para tratar de explicar un caso en particular.
Pero, quizás, ni siquiera Sherlock Holmes podría resolver un caso tan complejo como la crisis del coronavirus, en el que apenas empezamos a conocer qué funciona y qué no. O dónde. "Hay países con ingresos bajos y medianos que han dado grandes pasos, por ejemplo, en la entrega de vacunas o en la eliminación de la desnutrición. Pero cualquiera que quiera identificar esos países, averiguar cómo lo han hecho y aplicar esas lecciones en su propio país, tiene mucho trabajo por delante", apunta Gates.
De hecho, para ayudar a identificar y estudiar qué países sin muchos recursos han logrado avances significativos en la lucha contra la Covid, una suma de expertos y líderes desde universidades hasta la Organización Mundial de la Salud (OMS) se han adherido al programa Exemplars in Global Health, el proyecto de investigación que cuenta con el apoyo de la firma de inversión Gates Ventures y la fundación filantrópica de Bill Gates y su mujer, Melinda, tal y como recoge este artículo de la CNBC. El programa trata de recoger información clave en áreas como la tasa de mortalidad en niños menores de cinco años, entrega de vacunas, rol de los trabajadores de salud comunitarios, preparación y respuesta ante una epidemia...
"Exemplars se trata de descubrir cómo mejorar la atención médica en función de las evidencias de lo que funciona. Ayudará a los gobiernos a utilizar el tiempo y el dinero de manera más eficiente. Y, en plena pandemia de la Covid, nunca ha habido una mayor necesidad de obtener el mayor impacto por cada dólar gastado", apunta Gates. En este sentido, considera clave esa labor de investigación previa: "En los deportes, cada entrenador puede estudiar los equipos más exitosos y descubrir qué están haciendo bien. No hay razón para que las cosas sean diferentes cuando el objetivo es prevenir muertes infantiles en lugar de anotar 'touchdowns'".
