Cómo trabajar con un colega que siente que todo el mundo está en su contra

  • Es el típico que nunca hace nada mal y que piensa que la culpa de todo la tiene el resto. El peor compañero que puedes tener. Pero tiene solución
No es fácil trabajar con personas que detestan lo que hacen. / Pixabay
No es fácil trabajar con personas que detestan lo que hacen. / Pixabay

Es bastante común encontrarte con este tipo de personas. Conviven contigo en tu lugar de trabajo y si no tienes cuidado pueden arrastrarte a su oscuro pozo de victimismo.

Probablemente lo tengas sentado al lado. Son el tipo de persona que piensan que todos están en su contra. Es el típico que nunca hace nada mal y que la culpa de todo la tiene el resto. Tener un compañero de este calibre puede ser algo destructivo para ti y contraproducente para la empresa. Rebecca Knight lo sabe y por eso ha hablado con algunos expertos para encontrar soluciones a este problema. En un artículo para 'Business Harvard Review' ha desarrollado una serie de claves que pueden ayudarte con este compañero/problema, si lo tienes. 

Los expertos dicen…

Tener cerca a alguien victimista es un lastre y un verdadero problema. La profesora de Harvard Kennedy School y autora de 'Failure to Communicate', Holly Weeks, lo cuenta en primera persona: "Te sientes atrapado", dice ella. "Ves a esta persona caminando hacia ti y tu corazón se hunde". Esto es debido a la negatividad que irradian.

Con respecto a este tema, Amy Jen Su, socia gerente de Paravis Partners y coautora de 'Own the Room', dice que "cuando estás ocupado, lo último que necesitas es estar cerca de alguien que ve el mundo como un vaso medio vacío. Ante esto, lo único que puedes hacer es controlar tu respuesta”.

Os dejamos aquí una serie de consejos para llevar a cabo si trabajas cerca de un colega de estas características.

Ten empatía

Para esto tienes que interiorizar que la condición de victima de tu compañero no es culpa tuya. No te lo tomes como algo personal. Puedes ser algo compasivo. Weeks recomienda tratar de “cambiar la forma en la que ves a la persona y trata de ajustar tu reacción psicológica de alguna manera que ayude”. En definitiva: ser empático. No olvides que tu colega no trata de volverte loco deliberadamente.

Hay que ser positivo

Tienes que tratar de protegerte continuamente del comportamiento tóxico de tu colega. "Necesitas rodearte de personas que te traigan energía, te eleven y que sean fuerzas positivas", aconseja Su. Y cuando te toque estar cerca de esta persona, intenta potenciar otros lados de ella que no sean el victimismo que te saca de quicio.

"Desvíe el enfoque de esta persona para que se aleje del fantasma. Hazlo ofreciendo una narrativa contraria a su versión”, dice Weeks.

Validar con cumplidos

"La validación es a menudo el eslabón perdido para personas como esta", explica Su. Y añade que "ellos no se sienten vistos ni escuchados y, por lo tanto, piensan: ‘Si me quejo obtendré algo de reconocimiento y algo de aprecio’".

No hay que ser falso pero si potenciar sus habilidades y dar un poco de refuerzo positivo. Probablemente esta reacción le aleje por un tiempo de su actitud pesimista.

Hablando se entiende la gente. / Pexels
Hablando se entiende la gente. / Pexels

Proponer soluciones

"Esta persona puede quejarse porque tiene una necesidad tácita que no se está abordando", dice Su. Por eso es importante que des soluciones a sus quejas. Cuando propongas soluciones a las quejas constantes es probable que tu colega deje de ver como una salida la queja continuada y puedes acabar ayudándole a resolver los problemas de fondo que podrían ser la solución definitiva a su condición de víctima.

Ser directo

Si la actitud de tu compañero te arrastra y te hace sentir sentimientos negativos en tu horario laboral, hay que ser tajante. “Si esta persona está haciendo mella en los resultados comerciales, necesitas hablar con ella sobre el impacto que está teniendo", dice Su. Siempre amable y considerado. Lo ideal en esta conversación es que hables de la actitud a tomar, no de reprobar la que tiene.

Poner limites

"Si esta persona siempre va por tu escritorio para desahogarse, necesitas establecer nuevas reglas", dice Su. No hay que ser grosero ni irrespetuoso. Pero sí directo y establecer tus límites. "Quédate tranquilo y usa tu lenguaje corporal para indicar que no quieres meterte con él". Háblale claro y desde un prisma más laboral.

Así que si convives con un victimista, aquí tienes unos consejos que pueden servirte para que tu día a día sea menos duro debido estas personas tóxicas.

Mostrar comentarios