Uno de cada cuatro teletrabajadores dejará su lugar de residencia actual a lo largo del próximo año para vivir principalmente en el campo, ya sea de manera puntual o permanente, según datos de un informe de InfoJobs sobre la vuelta a la oficina. En concreto, el 17% de los trabajadores consultados por el portal de empleo asegura que cambiará de lugar de residencia de forma puntual mientras que el 7% lo hará de manera permanente. Es por lo que la fórmula planteada por los 'nómadas digitales' van ganando cada vez más adeptos.
Según el estudio, el fenómeno de la deslocalización está especialmente vinculado a los trabajadores más jóvenes, aquellos que tienen entre 16 y 34 años. Así, el 17% de los 'millennials' afirma haber cambiado de lugar de residencia en el último año, frente a un 31% que dice que, a pesar de que sí teletrabajó, decidió no cambiar de residencia. Además, según un estudio realizado por Econocom, el teletrabajo ha generado satisfacción entre un 72 % de los trabajadores que han experimentado esta fórmula. En cuanto a las ventajas percibidas destacan el tiempo ahorrado durante los trayectos (94 %) y el dinero ahorrado (87 %).
Una mayor conciliación
Daniel Brito, un joven periodista canario de 25 años, ya fue contratado en la modalidad de teletrabajo desde un primer momento por parte de su empresa. A la víspera de que la pandemia del coronavirus inundase nuestra actualidad, Daniel fue contratado desde Madrid por Mediaset para redactar contenido SEO teletrabajando. Esto le ha permitido volver a Lanzarote, en Islas Canarias, desde la capital de forma intermitente todas las veces que ha considerado oportuno para instalarse en su casa familiar. Es por lo que el mayor periodo de tiempo que ha permanecido en las islas es de un total de cuatro meses. "Lo he hecho con mucha tranquilidad, nunca me impusieron que tuviera que estar en Madrid", asegura Brito.
A pesar de que el grupo mediático ya le ha comunicado la intención de una próxima incorporación a la redacción de manera presencial, el lanzaroteño explica que durante esos meses, en cuanto terminaba su jornada laboral, estuvo yendo al gimnasio o quedando con sus amigos. Además, al ser una hora menos respecto al horario peninsular, a pesar de madrugar más, terminaba su jornada laboral antes y podía aprovechar más el día. "Podía terminar de trabajar e irme a la playa, algo que no puedo hacer en Madrid. Aprovechaba más el día y tenía más tarde libre", recalca Daniel Brito.
Ganas horas de vida, da muchísimo tiempo libre y eso no se puede pagar de ninguna manera
En esta misma línea, una vez terminó sus estudios en Economía y Relaciones Internacionales, Miriam Benítez fue contratada en una gestoría online especializada en asuntos laborales a través de una plataforma. Desde el Covid-19 todos sus empleados empezaron a teletrabajar. A pesar de haber vuelto a la oficina, Miriam ha empezado a cursar un máster de Economía Pública en Valencia y se le ha permitido continuar a distancia mientras completa sus estudios. Es por lo que la madrileña se ha convertido en, según sus propias palabras, "una excepción dentro de la empresa".
La joven expone abiertamente los beneficios que ha experimentado a través del teletrabajo. Desde su punto de vista, reducir los tiempos en los desplazamientos pendulares entre el trabajo y la residencia es toda una ganancia. "Al final sales de trabajar y ya estás en tu casa. Con respecto a la conciliación con tu propia vida, teletrabajar es espectacular. Ganas horas de vida. Da muchísimo tiempo libre y eso no se puede pagar de ninguna manera", recalca Benitez. "Ahora me da muchas facilidades para poder seguir formándome". Al igual que en este desplazamiento por estudios que le está permitiendo también conocer Valencia, en otros viajes ha aprovechado para teletrabajar y aprovechar las tardes.
No apto para todo el mundo
Asimismo, la ley que regula el trabajo a distancia fue aprobada por el Gobierno el pasado 2020 con el respaldo de los agentes sociales. Mucho antes de que esto sucediese, Ana Cirujano comenzó a compartir sus experiencias como teletrabajadora nómada a través de un blog llamado Easy Workation desde hace unos años. Uniendo las palabras en inglés de 'work' y 'vacation', la diseñadora web cuenta a La Información que esta fórmula "no es para todo el mundo" y que las imágenes de personas con un portátil en la playa son "completamente falsas".
Por las mañanas soy más productiva y al estar de vacaciones estás deseando dejar de trabajar para conocer el sitio y hacer turismo
En su caso, especialmente por su carrera profesional, ha podido compatibilizar su teletrabajo con viajes intermitentes a varios países o diferentes zonas de España."En mi caso me organizo muy bien el tiempo. Pero al principio me costaba mucho. Por las mañanas soy más productiva y al estar de vacaciones estás deseando dejar de trabajar para conocer el sitio y hacer turismo", asevera Cirujano.
Según sus propias palabras, uno de los consejos a seguir sería separar el horario del trabajo del ocio, y dar "siempre" prioridad a terminar la tarea del día, ya que "a veces" no se consigue terminar lo que tienes que hacer esa jornada. En último lugar, la especialista en datos subraya que esta fórmula sería inviable en puestos que requieran un mayor contacto humano y que, a pesar del 'boom' que ha supuesto la pandemia, en España "no tenemos cultura del remoto".
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