Barcelona Activa diseña un programa de responsabilidad corporativa con sus colaboradores

La directora de Barcelona Activa, Sara Berbel, ha afirmado que la agencia está diseñando un programa de responsabilidad social corporativa con el objetivo de trabajar con empresas que hagan contratos de calidad y que "apuesten por la dignidad de sus trabajadores".

En una entrevista de Europa Press, Berbel ha asegurado que se fomentará que las empresas que colaboren en los distintos programas de ocupación de Barcelona Activa ofrezcan condiciones laborales dignas.

En este sentido, ha recordado que las empresas de economía social y solidaria crean empleo de mayor calidad: "Hay una apuesta más firme por contratos indefinidos, incorporan a más jóvenes y mujeres, y tienen menos diferencias salariales, por lo que son más igualitarias".

Sobre la posibilidad de introducir un salario mínimo de ciudad para combatir la precariedad, Berbel ha dicho que el Consejo Económico y Social de Barcelona (CESB) y las patronales iniciarán un trabajo conjunto para llegar a un acuerdo para introducirlo en la negociación colectiva.

"El Ayuntamiento puede instigar, impulsar y acompañar, pero son los agentes sociales y económicos los que deben tomar la decisión", ha asegurado, y ha explicado que desde la concejalía de Derechos Sociales se están impulsando rentas para colectivos específicos como familias monoparentales y las que están en riesgo de exclusión y pobreza.

ECONOMÍA PARA PERSONAS

Además, ha explicado que, entre las principales líneas del plan de reorientación para Barcelona Activa, se encuentra el reconocimiento a la 'economía de las curas', que apuesta por organizar la economía en función de las necesidades de las personas.

"La economía debe estar adaptada a las personas, y no al revés", ha insistido, y ha observado que el centro de la economía no debe ser la empresa y la creación de beneficio, sino que se debe organizar la empresa en función de las necesidades de las personas.

Berbel ha lamentado que las mujeres tienen dobles jornadas, son las que menos duermen y las más estresadas de Europa, y ha criticado que el trabajo de curas y las tareas domésticas deben salir de la marginalidad y "situarse en el centro".

Ha expresado que a la Escuela de Mujeres Profesionales y Directivas de Barcelona Activa llegan muchas mujeres con ideas pero que, a medida que avanza el proyecto, van abandonando las sesiones: "Vamos perdiendo a las mujeres por el camino. Dicen que al final lo dejan porque no pueden más, que es un esfuerzo muy grande".

Berbel ha asegurado que su "sensación de culpa es enorme", y ha alertado de que los proyectos presentados por mujeres parten de menos financiación, y que, en general son mucho más pobres que los hombres, ya que cobran menos, tienen contratos a tiempo parcial, menos capital para empezar y menos financiación.

"La tendencia social es que las mujeres no serán igual de buenas en el ámbito económico", ha expuesto, y ha defendido que las propias mujeres tiene autopercepciones distintas a las capacidades que realmente tienen, por lo que ha señalado que existe un componente educativo y personal en esta situación.