En la localidad de Tumbes, que se encuentra cerca de la frontera con Ecuador, los profesores cortaron uno de los principales puentes de la ciudad, mientras que en Junín, en el centro del país, los docentes bloquearon una vía ferroviaria, según ha informado este viernes la agencia de noticias Andina.
Hace dos semanas, el presidente de Perú, Pedro Pablo Kuczynski, instó a los maestros a volver a las aulas y retomar las clases a cambio de "escuchar sus demandas", entre las que se encuentra reformar el sistema de evaluación del desempeño.
Asimismo, el presidente expresó su preocupación ante la huelga, que afecta a millones de niños en edad escolar, lo que les quita "oportunidades de futuro y preocupa gravemente a sus familias".
Las protestas, que comenzaron a mediados de junio, se acrecentaron a lo largo de julio y agosto y se extendieron a varios puntos del país.
En la ciudad de Puno, en el sur de Perú, los profesores han avanzado por las diferentes plazas y calles. En Oroya, cerca de los Andes, han bloqueado una de las principales carreteras.
A mediados de agosto se registraron en el país una serie de enfrentamientos entre las fuerzas de seguridad y grupos de profesores y policías en las inmediaciones del Congreso peruano, en la capital del país.
El presidente de la Cámara de Comercio de Perú, Mario Mongilardi, ha manifestado este viernes que la huelga está perjudicando seriamente la economía del país y que, por ende, el consumo privado y los negocios se están viendo afectados.
"El 100 por ciento de los comercios del centro de Lima se han visto afectado s de una u otra forma por la concentración de huelguistas magisteriales", ha aseverado Mongilardi, que ha condenado la movilización.
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