Las cuatro parones laborales se llevarán a cabo durante los días 25 y 26 de octubre y 7 y 8 de noviembre. Las principales organizaciones del sector, UGT FICA, FeSMC-UGT y CC.OO. de servicios a la ciudadanía, creen que es "irrenunciable" que se alcance un incremento salarial de entre el 1,8% y el 3%.
Asimismo, piden que la aplicación de la subida sea con carácter retroactivo y que no sea compensable ni absorbible y con cláusula de revisión salarial. También quieren que se elimine la prioridad de la antigüedad para elegir el periodo de disfrute de las vacaciones.
La ultra actividad indefinida, incluir en el convenio un plan de igualdad, un protocolo de actuación en casos de acoso sexual o laboral, el reconocimiento de las parejas de hecho y la posibilidad de disfrutar del permiso por hospitalización de familiares son otros de los requisitos imprescindibles para las organizaciones sindicales.
Hasta los días de la convocatoria de la huelga, los sindicatos van a intensificar el proceso de asambleas de trabajadores en los centros de trabajo con la intención de dar a conocer "de primera mano" las razones que hacen inevitable la huelga y apoyen las reivindicaciones sindicales a favor de un "convenio digno".
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