En un comunicado recogido por Europa Press, los municipios de zonas nucleares españolas consideran que la posición de la gran mayoría de los partidos políticos del país conlleva "la desaparición temprana de las centrales nucleares, lo cual se ha refrendado por la decisión tomada por la mayoría del Congreso de los Diputados a favor del cierre de las centrales a sus cuarenta años de funcionamiento".
Esta realidad, han recalcado, "cobra mayor importancia si cabe" por el nuevo posicionamiento de empresas del sector nuclear "que consideran el cierre de las centrales como una verdadera opción, al considerar que su rentabilidad ha desaparecido prácticamente".
El texto apunta la mayor preocupación de los alcaldes "al observar que nadie, de los que se posicionan a favor del cierre, manifiesta ningún interés por el futuro de los ciudadanos que viven en el entorno de estas plantas, que son los que se verán realmente afectados por la pérdida de una actividad económica que se instaló para benefició de las zonas más desarrolladas de España".
Además, entienden que estas decisiones se toman "sin pensar en solucionar la gestión de los residuos y se pretende, como en Almonacid de Zorita o en Garoña, abandonar la actividad y dejar los desechos".
Estas preocupaciones se basan, han explicado, en que actualmente existen almacenamientos de residuos en todas las piscinas de combustible de las centrales y existen almacenamientos en seco al aire libre en Trillo, Almonacid de Zorita y Ascó, está pendiente de la licencia municipal el de Santa María de Garoña, y está en fase de autorización el de Almaraz.
Si a ello se añade la situación del ATC de Villar de Cañas, "cada día con más complicaciones técnicas y con más oposición ciudadana y política", la situación "lleva a una realidad realmente negativa para los ciudadanos del entorno nuclear que han tenido que convivir con estas instalaciones sin haberlo decidido así en ningún momento".
A ello suman también la posición del presidente de Iberdrola, Ignacio Sánchez Galán, quien entienden que está "a favor del cierre de Santa María de Garoña", lo que supondría "el cercano cierre de las centrales nucleares de nuestro país".
IMPEDIR LOS "VERTEDEROS DE DESECHOS NUCLEARES"
Esta perspectiva de futuro hace que los municipios de estas áreas se vean "obligados" a "redoblar los esfuerzos" a favor de un desarrollo alternativo para sus zonas, que "impida que se utilicen sus emplazamientos como vertederos de desechos, los cuales no se pueden llevar a un almacenamiento adecuado por la incapacidad de la clase política de tomar acuerdos social y técnicamente sostenibles".
Los municipios de AMAC reclaman por ello la implicación del Gobierno de España que surja de las próximas Elecciones, de los gobiernos autonómicos y de las empresas propietarias de las centrales nucleares, en el desarrollo alternativo de las zonas nucleares.
Al mismo tiempo se oponen "por todos los medios a la construcción de vertederos de residuos radioactivos de alta actividad en sus emplazamientos para evitar las habituales políticas de hechos consumados tal como nos tienen acostumbrados".
AMAC ha manifestado la intención de comparecer "en todos los expedientes de licenciamiento" que se incoen en el Ministerio de Industria y Energía para el almacenamiento de residuos y para las inversiones que se realizan en las plantas para oponerse a toda actividad que conlleve un aumento de residuos y su almacenamiento en el emplazamiento.
Los municipios de AMAC defenderán su posicionamiento ante las formaciones políticas que se presenten a las Elecciones Generales del mes de junio y ante los grupos parlamentarios que surjan de las mismas y solicitará entrevistas "a alto nivel" con los gobiernos autonómicos para reivindicar su implicación en el futuro de los habitantes de las zonas nucleares.
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