Fapas afirma que la "gestión caótica" del lobo es la causa de los ataques a la ganadería

  • El Fondo para la Protección de los Animales Salvajes (Fapas) ha alertado de que la población de lobos en la Cordillera Cantábrica está desestructurada y presenta en algunas zonas un mínimo poblacional. Una situación que según la organización se debe a la "gestión caótica" del lobo en Asturias y que "es la causante de los incrementos en los daños a la ganadería".
Fapas afirma que la "gestión caótica" del lobo es la causa de los ataques a la ganadería
Fapas afirma que la "gestión caótica" del lobo es la causa de los ataques a la ganadería
EUROPA PRESS
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A través de un comunicado, Fapas ha dado a conocer el estudio realizado el año pasado entre los meses de mayo y diciembre para determinar la presencia de lobo por impactos fotográfico en el área central de Asturias, en zonas de montaña ubicadas entre los 1.500 y 500 metros de altitud en los concejos de Teverga y Somiedo. En total se instalaron 10 estaciones de trampeo fotográfico distribuidas sobre una superficie de 20.000 hectáreas.

Los resultados son que cada grupo familiar, estructura de la que depende el lobo para sobrevivir, está formado en Asturias por una media de 1,3 ejemplares. Según han explicado desde Fapas esto datos dan como resultado un aumento de los ataques de lobos a la ganaderia: "A mayor número de ejemplares del grupo familiar de lobo, mayor capacidad de captura de presas silvestres y menor presión sobre ganado doméstico", ha afirmado la organización.

Así, han comentado que a menor número de ejemplares la modificación del comportamiento de caza se orienta hacia la captura de presas fáciles, "incremento de ataques a ganado doméstico". Para Fapas, la "gestión caótica" de los últimos seis años es la responsable de la situación actual, "derivada de una pérdida muy importante de la estructura familiar del lobo que impacta sobre territorios más bajos y cercanos a la costa."

"El dato más relevante es que la falta de estructura social de los lobos en áreas de alta montaña, lo que ha obligado a la población lobuna a estructurarse sobre mínimos poblacionales, es decir, presencia de ejemplares solitarios, o como mucho en grupo de dos con hembras desperdigadas sobre territorios donde buscan sobrevivir matando exclusivamente ganado doméstico", han explicado desde Fapas.

La organización ha afirmado que la situación conflictiva que se vive con el lobo en Asturias es responsabilidad de la misma Consejería de Agroganadería y Recursos Naturales, "al haber aplicado durante años una gestión anárquica que permite abatir lobos, cuando es necesaria una mayor estabilidad de la población del lobo", han sentenciado.

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