Según han informado en un comunicado, la Plataforma "siempre ha defendido que el agua de riego para la vega de Talavera debe provenir del río Alberche, como así ha sido desde la puesta en funcionamiento en los años 50 del pasado siglo de las infraestructuras públicas que dotaron a 10.000 hectáreas en Cazalegas, Talavera y Calera y Chozas".
"El agua del Alberche es de mucha mejor calidad que la del Tajo, está perfectamente regulada en los embalses de El Burguillo y San Juan, y los regadíos se sitúan en el tramo bajo del río, con lo que pueden ser dotados y satisfechos los aproximadamente 70 hectómetros cúbicos que consumen anualmente", señalan en el comunicado.
Asimismo, han criticado la "nefasta política hidrológica que condena a la cabecera del Tajo a servir al trasvase Tajo-Segura; y el aumento de reservas que en compensación el Canal de Isabel II mantiene sobre el Alberche, que ha hecho que en los últimos años no llegue prácticamente agua del Tajo ni del Alberche hasta Talavera".
Sin embargo, sí afirman que el menor consumo de la Comunidad de Madrid --una disminución de más de 100 hectómetros cúbicos al año en la última década--, hace que el Alberche "no sufra tanta presión". El caudal "legal" --que no ecológico--, fijado para Talavera es de diez metros cúbicos por segundo, mientras que lo que se prevé bombear desde el río hasta el Alberche son siete.
Con ello, "solo quedarán tres metros cúbicos por segundo en el Tajo a su paso por Talavera y volvería a estar seco a su paso por la ciudad, mientras el Alberche se bombea hacia los embalses del Canal de Isabel II en Madrid y el Alto Tajo al Tajo-Segura".
En este sentido, han manifestado que la operación de bombeo licitada, "no es más que otro clavo en el ataúd del Tajo y el Alberche a su paso por Talavera, otro clavo en las posibilidades de recuperar los dos ríos".
PLANES ANTAGÓNICOS
El Partido Popular ha firmado dos Planes de cuenca "antagónicos" con lo que establece la Directiva Marco del Agua, e incluso su propia legislación sectorial nacional. Éstos han sido recurridos ante el Tribunal Supremo por la Plataforma y se han presentado dos quejas ante la Comisión Europea. Todos los procedimientos siguen abiertos.
En opinión de la Plataforma, este proyecto licitado solo responde "a la estrategia de exprimir más al Tajo y de condenar al Alberche a que muera en los embalses de Madrid". Se tratan, han concluido, de "una tomadura de pelo y una burla a Talavera".
Lo que debería hacer el Ministerio es "licitar de una vez por todas las obras de modernización de los regadíos, con unas condiciones adecuadas de amortización por parte de los regantes".
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