El fuerte castigo a Telefónica en bolsa tras la presentación de unos resultados que no han convencido a los inversores y la caída de otros pesos pesados como Inditex (-1,5%) o Iberdrola (-1,7%) se ha llevado por delante los 10.000 puntos del Ibex 35. Los títulos de la operadora retrocedieron un 3,8%, hasta 6,29 euros, tras haber anunciado un recorte del 65% en su beneficio por el plan de bajas incentivadas puesto en marcha en nuestro país a finales del pasado ejercicio. El Ibex 35, la referencia española, ha sufrido una caída al cierre del 1,5%, hasta 9.931 puntos, desandando parte del camino alcista de esta semana.
En Europa, junto a Telefónica son las compañías más cíclicas las que protagonizan los retrocesos dentro del Euro Stoxx 50. La aseguradora AXA (-3,3%), que ha rebajado sus perspectivas para este año, así como los gigantes del lujo LVMH (-1,7%) o Kering (-3%). El temor a los efectos del coronavirus en la economía vía cadena de suministro global están yendo a más en las últimas horas a medida que gigantes empresariales como Apple (-1,2%), y esta mañana su principal proveedor Foxconn, lanzan 'profit warning' a causa de la epidemia. A ella se han sumado el líder del transporte marítimo Maersk (-3,9%) y la aerolínea Air-France-KLM, que se dejó hasta un 3,8% en París.
La mañana se presenta de momento con recortes moderados en toda Europa y a vueltas con las novedades que van surgiendo sobre el coronavirus. "En principio, esperamos que las bolsas europeas hagan un pequeño alto en el camino, siendo factible que algunos inversores aprovechen los recientes avances de muchos valores para realizar beneficios (...) Decir, no obstante, que las noticias que llegan desde China sobre una sensible caída del número de nuevos contagios creemos que limitarán los descensos de los índices ya que servirán para afianzar la 'apuesta' de muchos inversores de recuperación en 'v' del crecimiento económico en China", apunta Juan J. Fernández-Figares, responsable de Análisis de Link Securities.
Esta pausa en la renta variable coincide con una toma de posiciones en activos más defensivos, como los bonos. La rentabilidad del bono español a diez años se reduce, así, hasta el 0,23% y nuestra prima de riesgo -el sobrecoste que tenemos que pagar por emitir deuda- desciende hasta los 66,8 puntos básicos, cuatro por encima de la portuguesa.
En lo que respecta a las materias primas, el otro activo refugio por excelencia, el oro, se mantiene en zona de máximos desde la crisis de 2013 y cotiza en 1.618 dólares por onza. Mientras, el precio del barril de Brent (referencia en Europa) se estanca en el entorno de los 59,22 dólares; mientras que el de crudo ligero West Texas se aprecia ligeramente hasta los 53,77 dólares. En el mercado de divisas, la búsqueda de refugio hunde un poco más al euro en su cruce frente al billete verde. El cambio queda fijado en 1,0792 unidades (en las últimas horas ha llegado a caer incluso hasta 1,0783 "billetes verdes", por lo que se mantiene en sus mínimos de los últimos tres años.
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