El Banco de Inglaterra inicia las ventas de bonos antes de otra subida de tipos

El Banco de Inglaterra (BoE) afronta la semana más importante en más de una década para su política monetaria. El jueves se reúne para adoptar una nueva subida de los tipos, pero este martes comienza la serie de ventas de deuda que tiene en balance con una operación de 750 millones de libras.  

De este modo, el ente que dirige Andrew Bailey retoma el plan de reducción de balance por 80.000 millones de libras a doce meses que suspendió tras la reciente crisis de la deuda británica y que le obligó a intervenir de urgencia con más compras masivas de bonos.

El BoE pondrá fin así a trece años de estímulos monetarios a su economía con un total de 838.000 millones de libras en compras de activos financieros, entre ellos los 90.000 millones adquirió en octubre. Se trata de un movimiento de restricción monetaria que volverá a presionar las rentabilidades de la deuda en el corto plazo conforme sigue subiendo tipos.

El BOE también está vendiendo bonos a precios más bajos de los que fueron comprados, obligándolo a realizar pérdidas, según informa Bloomberg. Traspasa esa responsabilidad al Tesoro, que este año fiscal transferirá más de 11.000 millones de libras esterlinas (12.400 millones de dólares) al BOE para cubrir las pérdidas proyectadas por estas operaciones.

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El nuevo escenario político dibujado por el Gobierno de Rishi Sunak, que releva a Liz Truss al frente de Downing Street, parece facilitar las cosas al banco central con planes de recorte de gasto público y subidas de impuestos que reducirán la emisión de bonos por parte del Tesoro británico. 

Sunak ya ha advertido que la entrada en recesión de la economía británica es posible pero es prioritario fortalecer las finanzas públicas. El plan de Truss de bajar impuestos y emitir más deuda provocó una de las peores turbulencias en décadas para los mercados vinculados a la libra.

Subida de tipos de 75 puntos básicos

Además de las ventas de bonos, el banco central prevé elevar las tasas de interés el jueves por octava reunión consecutiva para controlar la inflación por encima del 10%. Esta vez en tres cuartos de punto porcentual, según la mayoría de los analistas, hasta el 3%.  "Tal como están las cosas hoy, mi mejor suposición es que las presiones inflacionarias requerirán una respuesta más fuerte de lo que quizás pensamos en agosto", dijo el gobernador del BoE, Andrew Bailey, el 15 de octubre.

Los inversores esperan que la Tasa Bancaria alcance un pico apenas por debajo del 5% el próximo año, frente al 2,25% actual, explican los analistas de ING. "En primer lugar, el BoE podría validar las expectativas del mercado y subir 75 pb por primera vez en este ciclo de ajuste, pero indica claramente que es probable que sea algo excepcional. Alternativamente, el banco podría subir 50 pb, como lo hizo en septiembre, pero seguir indicando que está preparado para subir con fuerza si es necesario", agregan.