BBVA y Telefónica, dos de los 'pesos pesados' de la bolsa española, entran en las quinielas para abandonar el índice Euro Stoxx 50, el índice que incluye al medio centenar de empresas más capitalizadas de la zona euro. El servicio de estudios del Banco Sabadell lo asegura en su último informe en el que añade además a esa lista a la entidad gala Societe Generale y a la empresa alemana de asistencia sanitaria Fresenius. La crisis del coronavirus ha agudizado la caída en bolsa del banco y la teleco, que pierden un 46,12 y un 41,2% de su valor desde comienzos de año, respectivamente.
Al igual que el resto de entidades españolas y europeas, BBVA (16.936 millones de euros de capitalización) ha visto cómo el escenario de tipos de interés ultrabajos al que condujo la última crisis financiera, el aumento de los requisitos de capital y el proceso de venta del ladrillo en sus balances ha reducido de forma notable la rentabilidad de su negocio, impactando además en la cotización. En su caso se añade además la fuerte exposición a mercados emergentes como Turquía (Garanti) o México (Bancomer es la filial que más aporta a los beneficios del grupo), que se han visto azotados por las últimas crisis de divisas por la huida de los inversores al dólar en busca de refugio contra la incertidumbre.
El banco vasco ha perdido un 84,62% de su valor en el mercado desde los máximos históricos que alcanzó allá por febrero de 2007 (16,26 euros), justo antes de que estallase la crisis de las hipotecas 'subprime' en Estados Unidos que fue la antesala de la financiera. El valor cotiza actualmente en el entorno de 2,5 euros, es decir, en niveles de 1995 y por lo tanto muy cerca de sus mínimos históricos.
A BBVA le ha golpeado también de lleno el descalabro en bolsa de Telefónica (18.719 millones de valor bursátil), de la que es uno de los principales accionistas junto a Caixabank y a la mayor gestora del mundo, Blackrock. La batalla ‘low cost’ dentro de las operadoras, su elevado nivel de deuda o la exposición a Latinoamérica han torpedeado la acción, que 12 de octubre de 2007 llegó a tocar los 21,90 euros. Desde entonces se desploma un 83,92%. La compañía logró rebajar su nivel de pasivo un 7,5% interanual de enero a junio hasta los 37.201 millones de euros, recortándola en 1.000 millones a lo largo del segundo trimestre.
El informe publicado por el Sabadell se incorporarían al índice en sustitución de estos valores Prosus (la división internacional de activos de Internet de Naspers), la compañía de pagos holandesa Adyen, el grupo inmobiliario alemán Vonovia y el fabricante galo de bebidas alcohólicas Pernod Ricard. Los analistas de Banco Sabadell también contemplan la posibilidad de que la finlandesa Kone, cuarto fabricante mundial de escaleras mecánicas del mundo, entre al Euro Stoxx en sustitución de BMW.
Según Banco Sabadell, estos cambios están reflejando la "fuerte volatilidad y debilidad de algunos sectores" (Financiero, Telecos y Autos) y la pujanza de otros, destacando las nuevas tecnologías, medios de pago y e-commerce. La importancia que tiene mantenerse en el Euro Stoxx es que muchos fondos de gestión pasiva lo replican. Se da la circunstancia de que BBVA y Telefónica eran junto al Santander las tres únicas empresas españolas que se mantenían en el índice desde que éste fue creado hace más de dos décadas.
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