El mes de agosto ha empezado convulso y con más dudas aún si cabe para las bolsas de todo el mundo. Las nuevas entregas de la guerra comercial, la crisis política en Italia y el Brexit han vapuleado a los inversores en un momento del año en que el volumen de negocio ya es tradicionalmente bajo por las vacaciones, y han echado por tierra cualquier intento de rebote. Es lo que le ha pasado al Ibex 35 que, tras perder un 3,5% la semana previa, se ha dejado un 1,5% en el acumulado de las últimas cinco sesiones. En medio de tanta incertidumbre, con Donald Trump descartando cualquier acuerdo a corto plazo con China, la posibilidad de entrar en una guerra de divisas y la tensión política disparada en Europa, hay algunos valores que han sabido sacar partido a río revuelto. Tres en concreto brillan en este inicio de agosto: Cellnex, Ferrovial e IAG.
El rally de la empresa de infraestructuras de comunicaciones la lleva a marcar un nuevo máximo histórico en medio de este caos en los 36,04 euros por título. En el año acumula un rally del 71% cuando su índice de referencia, el Ibex 35, ha reducido su avance al 2,55%. En lo que llevamos de agosto y pese a la incertidumbre a nivel mundial y el temor a un frenazo económico, la firma capitaneada por Tobías Martínez se dispara un 6,3%. Lo hace después de haber presentado unos resultados en los que alcanza el 'brake even' o punto de equilibrio, puesto que de enero a junio no ganó nada, pero venía de perder 31 millones de euros en el mismo periodo del año previo. La antigua Abertis Telecom ha elevado además un 11% interanual sus ingresos del primer semestre hasta los 489 millones de euros.
En su caso también ha sido clave el espaldarazo recibido estos últimos días por el banco de inversión estadounidense JP Morgan que ha iniciado la cobertura del valor con una recomendación de 'comprar' y un precio objetivo de 40 euros, lo que le daría un potencial del 11% a los precios actuales. Cellnex se ha colado ya entre esa mitad de valores del Ibex 35 cuya capitalización supera los 10.000 millones de euros. Actualmente vale 10.764 millones de euros, tres veces más que cuando salió a bolsa hace ya cuatro años (3.244 millones.)
La firma catalana, que tiene entre sus accionistas de referencia a la familia Benetton (Edizione), a los italianos de Atlantia y al gigante estadounidense Blacrock, se encuentra, además, en pleno proceso de expansión y justo antes del verano se hizo con 10.700 nuevas torres por 2.700 millones de euros. Lo hizo tras ampliar capital a comienzos de año para financiar precisamente ese crecimiento.
Junto a Cellnex, otro de los valores que ha sabido capear el temporal estos días ha sido Ferrovial (18.641 millones de capitalización), y eso que es uno de los más expuestos a la incertidumbre del Brexit, puesto que gestiona los aeropuertos de Heathrow y los de ASG (Aberdeen, Glasgow y Southampton), compañía esta última en la que cuenta con una participación del 50%. La multinacional presidida por Rafael Del Pino registra un alza en bolsa del 5,3% en lo que llevamos de mes y en el año se dispara por encima del 42% hasta los 24,86 euros.
En el horizonte más cercano, Ferrovial tiene pendiente la aprobación de la construcción de la tercera pista en el aeropuerto de Heathrow, un proyecto en el que el grupo lleva inmerso ya varios años. Pese a que una salida 'a las bravas' de los británicos de la UE puede afectar negativamente a este proyecto -esta posibilidad parece más cercana en los últimos días a raíz de las declaraciones del primer ministro Boris Johnson- el grupo de servicios ha recibido esta semana un empujón de otro de los grandes de la inversión en EEUU.
Coincidiendo además con el nombramiento como nuevo consejero delegado del ex responsable de CEMEX en Estados Unidos, Ignacio Madridejos, Bank of America-Merrill Lynch (BofAML) ha elevado el precio objetivo de Ferrovial hasta los 25 euros por acción. Así y después del subidón que acumula desde comienzos de ejercicio, los títulos del grupo aún podrían revalorizarse otro 1%.
El tercer valor de este podio es IAG, el grupo de aerolíneas filial de Iberia y British Airways, es decir, otra de las compañías que más se juega con el 'divorcio' entre Reino Unido y los Veintisiete. Ni la posibilidad más cercana de un Brexit duro, ni el hecho de que la libra haya marcado mínimos anuales y se encuentre cada vez más cerca de la paridad con el euro tras hundirse de nuevo en las últimas jornadas (hasta 1,0736 unidades), han impedido a la hispano-británica revalorizarse un 5,2% desde el 1 de agosto.
Cerrado el primer semestre del año, el grupo obtuvo un beneficio consolidado de 806 millones de euros, en lo que supone el 42,3% menos que un año antes (1.398 millones), sobre todo por la ausencia de extraordinarios y un mayor gasto en combustible. Una vez que se descuentan las partidas excepcionales, el resultado neto crece el 0,4% y el beneficio de las operaciones se sitúa en 1.095 millones de euros, lo que también supone un retroceso del 11,7% al del mismo periodo del ejercicio previo.
En el caso de IAG, la banca de inversión ha sido casi unánime en el respaldo a la acción. Lo ha hecho JP Morgan, al reiterar su consejo de 'sobreponderar' y mantener su precio objetivo en 8,35 euros, lo que le otorga un potencial del 70%. RBC Capital Markets resalta la "flexibilidad" del grupo y el banco británico Barclays pone en valor que el grupo haya ratificado sus objetivos para este año; mientras el suizo UBS considera que estamos ante un buen momento para entrar en el valor.
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