Mínimos históricos en abril

La industria y los servicios de Alemania y Francia encaran su peor crisis por el virus

Los PMIs de Alemania y Francia se hunden a mínimos históricos en abril por el coronavirus
Los PMIs de Alemania y Francia se hunden a mínimos históricos en abril por el coronavirus
Nerea de Bilbao

La magnitud del colapso de la industria y el sector servicios en abril de las dos mayores potencias de la zona euro, Alemania y Francia, no tiene comparación con ninguna otra crisis previa, ni tan siquiera con la financiera de 2008. Nunca antes desde que IHS Markit recopila estos datos en su encuesta de sentimiento económico los dos países habían tenido que afrontar un retroceso similar de sus principales actividades productivas. El confinamiento de la población y el cerrojazo al que se han visto sometidas las empresas para atajar la expansión del coronavirus explican esta evolución sin precedentes. 

El índice de gerentes de compras para el sector servicios se ha hundido en abril a 15,9 puntos en Alemania desde los 31,9 que marcó el mes previo. Se trata, así, del dato más bajo desde que comenzó el registro hace más de 22 años, con casi tres cuartas partes de las empresas informando de un menoscabo de su actividad. Toda lectura inferior a los 50 puntos en este indicador muestra una contracción de la actividad. El deterioro de la producción manufacturera germana también registra un récord, al haberse desplomado hasta los 19,4 puntos desde los 41 del mes previo. 

Las encuestas de abril de PMI muestran que "la actividad comercial en las manufacturas y los servicios se redujo a un ritmo diferente a todo lo visto anteriormente", asegura Phil Smith, economista principal de IHS Markit. De hecho, en el peor momento de la última crisis financiera, el PMI compuesto de Alemania marcó un mínimo de 36,3 puntos, muy por encima del nivel actual.  “Los proveedores de servicios cargaron con el peso inicial de las medidas de contención del virus, pero el colapso de las restricciones de la demanda y la oferta ha alcanzado a los fabricantes, que ahora también están registrando una caída sin precedentes en la producción. El esquema de trabajo a corto plazo está teniendo el efecto deseado de frenar la pérdida de empleos, y el empleo cayó mucho menos que la producción durante abril", añade el experto.

En el caso de Francia la situación es todavía más delicada, puesto que la actividad comercial se ha hundido hasta los 10,4 puntos en abril desde los 27,4 de marzo, un nivel también inédito. En su caso, los servicios son el sector que más aporta a la economía francesa, lo que da idea de hasta qué punto puede verse afectada por el parón. La actividad de la industria cae también, pero lo hace con menos fuerza para situarse en 31,5 puntos este mes desde el 43,2 de marzo.

“En el futuro, hay dos áreas clave de enfoque. En primer lugar, ¿con qué rapidez se levantarán las restricciones una vez que comiencen a reducirse gradualmente el confinamiento el 11 de mayo? Esto dará la indicación más clara sobre cómo de rápido podemos esperar que la actividad se recupere en el corto plazo. En segundo lugar, ¿la relajación de las restricciones conducirá a un segundo brote del virus? De ser así, cualquier esperanza restante de la conocida como recuperación "en forma de V" desaparecerá", apunta Eliot Kerr, economista de IHS Markit.

Precisamente esta mañana y en declaraciones a la radio gala Franceinfo El ministro de finanzas francés, Bruno Le Maire, ha insistido en que su objetivo es que todas las empresas puedan reabrir cuando el confinamiento del país termine el 11 de mayo, aunque los bares y restaurantes permanecerán cerrados.

Mostrar comentarios