Solaria aún no se ha recuperado del golpe de Goldman Sachs. El informe del banco de inversión estadounidense dio al traste con el rally que vivía la compañía del Ibex 35 puesto que cayó un 13,51% el viernes y este lunes los descensos han sido del 1,87%. Este varapalo, tras destacar la entidad que la compañía está sobrevalorada en bolsa, ha provocado que muchos inversores se lanzaran a vender sus títulos e incluso a alguno le pilló a pie cambiado ya que emergieron como accionistas significativos días antes del fuerte castigo bursátil.
Este ha sido el caso del iShares Global Clean Energy UCITS ETF, de la gestora BlackRock, que es el mayor ETF (fondo cotizado en bolsa) del sector energético a nivel mundial con un patrimonio superior a los 5.000 millones de dólares (casi 4.150 millones de euros). El viernes notificó su participación del 3,043% del capital y este martes se elevó hasta el 3,099%, lo que le ha convertido en accionista significativo, según consta en los registros de la CNMV. No obstante, la posición se construyó días antes del desplome ya que fue el 5 de enero cuando sobrepasó el umbral del 3%.
Este ETF de BlackRock cuenta entre sus mayores posiciones con Plug Power, compañía estadounidense dedicada al desarrollo de sistemas de pilas de combustible de hidrógeno para vehículos; Enphase Energy, que cotiza en el Nasdaq y se dedica a la energía solar, o la energética neozelandesa Meridian Energy, como grandes destacadas. En total, estas tres posiciones superan los 1.200 millones de dólares.
La marcha de este ETF, al igual que la de los fondos de inversión en el sector, ha sido muy positiva durante los últimos años. El pasado ejercicio multiplicó su tamaño por casi 2,5 veces (+140%) y en 2019 se anotó un avance del 43,65% gracias a su exposición a compañías de energías limpias ampliamente diversificadas y su inversión directa en 30 compañías globales, entre las que se encuentra la española Solaria.
Este no es el único ETF que está presente en el accionariado de Solaria. El Invesco Solar ETF también está aunque con una participación algo menor puesto que el último dato, notificado este lunes, era de un 3,012%, superior al 3%, lo que le convierte en accionista significativo. No obstante, su tamaño es menor al de su 'rival' Blackrock ya que tiene un patrimonio de cerca de 4.600 millones de dólares (casi 3.800 millones de euros).
Goldman Sachs en su informe que agitó a las renovables destacó que el precio objetivo de 25,5 euros por acción para Solaria se situaba un 4% por debajo de su precio de cotización, motivo por el que rebajaron su recomendación de 'comprar' a 'neutral'. Además, destacaron que desde que añadieron a la compañía a su lista de compras el 18 de noviembre, "ha subido un 64% frente al rebote del 4% del sector y la subida del 3% del Ftse World Europe".
El escenario base del banco estadounidense implica una caída continua en el mercado nacional de Solaria, del 30% actual al 20% en la segunda mitad de esta década y hasta el 15% más allá de 2030. Aun así, apuntan la posibilidad de una revolución en la compañía, que bautizan como la 'Solaria 2.0' y que consistiría en su capacidad para replicar su éxito español en todo el Mediterráneo (Italia, Grecia, Portugal) o en Estados Unidos. Bajo este hipotético escenario, situarían su valoración en los 32 euros por acción, frente a los 26,26 euros en los que cotiza actualmente, lo que sí le daría potencial alcista.
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