La recuperación bursátil va por barrios, pero está cobrando forma de V, vertical tanto en la caída como en la subida sin llegar a recobrar lo perdido. Las expectativas de un acuerdo europeo para dar respuesta a la crisis económica del Covid-19 y la reaparición de la Fed de EEUU con los detalles de su bazuca de 2,3 billones de dólares en pos de una "recuperación vigorosa", en palabras de Powell, han dado alas a los mercados en plena Semana Santa.
El Ibex 35, la referencia europea, subió un 1,7% el viernes, hasta 7.070 puntos. El índice completa su mejor semana desde junio de 2012 con un ascenso acumulado del 7,5% que le sitúan un 20% por encima de los mínimos del pasado 16 de marzo por debajo de los 6.000 puntos. Hay valores, sin embargo, que acumulan subidas superiores al 60% después de estar casi desahuciados hace apenas tres semanas.
La constructora ACS es el valor que más sube desde sus mínimos, aunque también fue uno de los que más cayó durante el reciente crash bursátil. Desde su máximo de tres meses en los 35 euros, hasta los mínimos en 11,2 euros, la compañía que preside Florentino Pérez se dejó un 42% de su valor en bolsa. Sin embargo, ha resurgido en bolsa un 78% hasta recuperar los 20 euros por acción. La compañía ha recomprado más de 150 millones de euros de sus propias acciones y contrató un 'suelo' bursátil con un banco de inversión el pasado 18 de marzo.
En concreto, ACS recurrió a los derivados financieros para frenar la caída. Se trata de una estructura 'collar equity swap' liquidable por diferencias, tanto en efectivo o acciones, sobre 12 millones de acciones. Según ese contrato, la constructora se queda con opciones de compra (alcistas) sobre de 12 millones de títulos con un precio de conversión de 14 euros, mientras que el banco de inversión se hace con las opciones de venta sobre el mismo paquete accionarial con un precio de ejercicio o strike en 10 euros, además del uso de estos títulos. ACS paga una interés y una comisión a cambio de esta estructura que, sin embargo, le está haciendo ganar mucho de dinero por el momento: unos 72 millones de euros.
La cadena hotelera de la familia Escarrer ha sido uno de los valores más golpeados por la crisis del Covid-19 hasta el punto de tener que cerrar sus establecimientos, sus generadores de ingresos, mientras dure la cuarentena. El escenario de cero ingresos, sin embargo, no le ha sentado mal a Meliá Hotels, que ha llegado a caer en bolsa un 71%, de 8,8 a 2,5 euros, aunque en cuestión de dos semanas ha rebotado un 74%, hasta situarse por encima de los 4,3 euros por acción.
El grupo siderúrgico, como otras miles de empresas, ha tenido que parar su actividad, pero además se está viendo afectada por la caída de pedidos de sus clientes por la recesión global. Arcelor Mittal es el tercero de los valores del Ibex 35 que más rápido se ha recuperado. Después de moverse por encima de los 16 euros por acción a mediados de febrero, la compañía se desplomó por debajo de 6 euros hace dos semanas y ahora vuelve a mirar de cerca a los 10 euros, lo que le sitúa como el tercer valor del Ibex 35 con mayor potencia en la recuperación: un 60%.
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