Los clubes españoles de fútbol ingresan cada vez más dinero en sus arcas gracias a los derechos audiovisuales, que han contribuido a reducir las deudas con Hacienda junto a, sobre todo, el control económico de los clubes realizado por parte de LaLiga. El dato es contundente: los equipos de fútbol deben solo 218 millones de euros a Hacienda y 31 millones a la Seguridad Social, lo que supone adelgazar dichos montantes en un 66% desde 2010.
Este incremento de los ingresos ha provocado que cada vez más clubes dejen atrás las pérdidas de cursos anteriores y obtengan beneficios. Estos números verdes, unido a que detrás haya presidentes con grandes participaciones en el capital, ha provocado que los clubes de fútbol se lancen cada vez más al reparto de dividendos.
La práctica de repartir dividendos es algo común en los mercados cotizados y comienza a serlo en el mundo del fútbol. Las compañías bursátiles optan por repartir un alto porcentaje de los beneficios a sus accionistas y los clubes, que son mayoritariamente Sociedades Anónimas Deportivas, comienzan a ponerlo en práctica debido a su mejor situación económica.
El C.D. Numancia de Soria ha sido el último en repartir dividendos millonarios. El conjunto numantino, ejemplo de gestión económica gracias a sus beneficios año tras año, ya realizaba pequeños pagos de dividendos ejercicios atrás. No obstante, con el cambio de propietario llevado a cabo en septiembre el pago se ha disparado y alcanzará los 3,5 millones de euros.
Los nuevos propietarios del Numancia parecen tener claro que quieren recuperar parte de su inversión a través del reparto de dividendos. La sociedad Football Newco 18 SL, participada al 50% entre el presidente del conjunto soriano, Moisés Israel Garzón, y Francisco Velázquez, compraba el club a Paco Rubio y este próximo jueves, 21 de febrero, celebrará Junta General Extraordinario para aprobar el pago de un dividendo de 3,5 millones.
En el orden del día de la junta que se celebrará en la sede social del conjunto soriano se contempla dicho pago en el punto número 1 que señala la "información, debate y, en su caso, aprobación de dividendo con cargo a beneficios de los ejercicios anteriores". El pago es relevante ya que el conjunto numantino registraba un beneficio inferior a dicho montante la temporada pasada: ganaba 1,19 millones de euros, un 36,5% más que el curso anterior.
Este pago millonario no es el único que se realiza en el mundo del fútbol. El Sevilla FC es otro conjunto que reparte dividendos a sus accionistas. De hecho, el próximo 1 de marzo repartirá un dividendo bruto de 15 euros por acción a cada accionista del club andaluz, lo que equivale a un montante de 1,55 millones de euros. La cuantía es relevante pero sostenible ya que el equipo sevillano lograba unos beneficios de 25,72 millones la temporada pasada.
Otro club que quería realizar el pago de un dividendo millonario fue el Córdoba CF. Su antiguo presidente, Carlos González, quería embolsarse 1,5 millones de euros con el pago de dividendos en 2016 pero tanto el Consejo Superior de Deportes (CSD) como el Instituto de Contabilidad y Auditoría de Cuentas (ICAC) emitían informes negativos sobre dicha propuesta del máximo accionista del conjunto andaluz, por lo que finalmente no pudo llevarse a cabo.
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