Recorrido alcista

Dow Jones, objetivo 40.000 puntos: los factores que pueden hacer real esa meta

Observando el comportamiento en el final de año, con un rally que se fue ampliando, y con la nueva presidencia en Estados Unidos y con las políticas laxas, algunos analistas ya apuestan por este objetivo.

Fotografía de Wall Street, Dow Jones, 8 de febrero de 2018
Fotografía de Wall Street, Dow Jones, 8 de febrero de 2018
EFE

El recorrido alcista de Wall Street plantea el interrogante sobre si se pueden producir más revalorizaciones en 2021, poniendo el foco en el Dow Jones. Sobre todo, observando el comportamiento en el final de año, con un rally que se fue ampliando. Así, con la nueva presidencia en Estados Unidos y con las políticas laxas, algunos analistas ya apuestan a que los 40.000 puntos para el mencionado índice no sería una cota descabellada para ver a lo largo del ejercicio.

El tablero ante el que se encuentra la bolsa estadounidense es ciertamente más nítido. Antes de las elecciones en Estados Unidos, los mercados de renta variable se habían tomado un descanso. Posteriormente, tras la victoria de Biden, las acciones entraron en una fase de recuperación cíclica en la cual los sectores de valor y small caps llevaron al mercado a alcanzar nuevos máximos.

“Esto no significa que la suerte de los valores del sector tecnológico haya cambiado, sino que han cedido temporalmente la posta a los sectores de energía y financiero, los cuales han sido los que más se han beneficiado en dicho trimestre”, comenta Pierre Debru, director de análisis en WisdomTree.

Así, el telón de fondo hace que pueda plantearse la posibilidad de que el Dow Jones prosiga su camino alcista. ¿Por qué? Principalmente, porque está compuesto por más acciones value que de crecimiento, que son las llamadas por todos los expertos a cuajar los principales impulsos sobre el parqué.

“Las acciones value están mejor posicionadas para desarrollar un crecimiento continuo y, además, el 40% de los ingresos de las empresas del S&P proviene de la actividad comercial offshore”, destaca George Mentz, analista de Chartered Wealth Manager.

Ese mejor posicionamiento también tiene que ver con la evolución prevista de los tipos de interés. Al encontrarse en niveles de mínimos históricos para la compra de vivienda, las tarjetas de crédito, puede generarse un mayor volumen de transacciones. “Asimismo, pueden permanecer así durante años, lo cual aumenta la renta disponible y el ahorro”, añade Mentz.

Este “dinero barato” de la Fed permite que nuevas empresas crezcan sin la carga de un alto interés. “La liquidez y este beneficio se incorporan a los precios de las acciones que cotizan en el Dow Jones, por lo que se puede despejar su camino hacia la conquista de los 40.000 puntos en algún momento de este año”, confirman los analistas de Morgan Stanley.

La nueva hoja de ruta de la administración Biden

Por otro lado, el hecho de que la administración Biden probablemente aumente los impuestos a las empresas, puede impulsar los precios de algunas acciones a medida que las empresas reinviertan su dinero. “Al no repatriar dinero en el extranjero o invertir en activos utilizando estrategias sin impuestos, puede hacer que las compañías se adapten al gasto y la nueva tributación”, explican desde SunTrust.

Un mayor gasto público en los próximos 1 a 4 años puede aumentar los ingresos disponibles para las empresas, ONG y ahorradores que reciban ayudas del gobierno. Otro catalizador que ha de tenerse en cuenta. Con todo, los analistas de Schwab dicen que a Estados Unidos le fue bien a nivel nacional durante los últimos 5 años, por lo que predicen un mejor crecimiento de las acciones internacionales durante la próxima década.

“Muchas de estas acciones también cotizan en NASDAQ, NYSE y se incluyen en una gran cantidad de ETF Exchange Traded Funds que poseen los estadounidenses”, detallan estos expertos.

Por otra parte, el hecho de que el dólar esté bajando de sus máximos recientes es un factor a tener en cuenta. “Una depreciación en la divisa estadounidense hace que los productos, servicios y acciones estadounidenses sean más baratas para invertir”, completan desde SunTrust. “Es un factor que hay que tener muy presente”, añaden.

De igual modo, las inyecciones de liquidez y los préstamos de estímulos frente al Covid-19 tendrán un efecto duradero. Muchas pequeñas empresas pidieron prestado mucho dinero para invertir y los tipos son bajos. “Por lo tanto, estas empresas pueden invertir ese capital prestado o gastarlo, lo cual puede incrementar su cotización”, dicen los analistas de Morgan Stanley.

Pero no todo queda ahí, ya que las empresas de tecnología e Internet del Dow Jones con el auge del teletrabajo pueden tener un auge a largo plazo. “Esa dinámica les puede permitir generar muchos ingresos en el extranjero que pueden impulsar sus precios en los mercados”, sentencia Mentz.

Mostrar comentarios