Situación de emergencia. El Banco de Inglaterra ha anunciado este martes una nueva intervención en el mercado de deuda pública para intentar frenar las ventas masivas que se están produciendo y que amenazan con generar una crisis en Reino Unido. El banco central que dirige Andrew Bailey ejecuta su tercera salida al mercado en menos de dos semanas y ampliará el alcance de sus operaciones diarias de compra de gilts (bonos soberanos británicos) para incluir también compras de activos indexados a la inflación.
El banco comprará hasta 10.000 millones de libras esterlinas al día (unos 11.300 millones de euros), de los cuales hasta 5.000 millones de libras se asignarán a bonos convencionales a largo plazo y hasta 5.000 millones de libras a gilts indexados. "El precio de esta operación adicional reflejará su carácter de respaldo y que no es un instrumento de política monetaria. El tamaño total de estas subastas se mantendrá bajo revisión. Todas las compras se desharán de forma ordenada y fluida una vez que se considere que han disminuido los riesgos para el mercado", justifica.
Pese a la ronda de intervenciones, la libra, que refleja la incertidumbre sobre la deuda y la economía de Reino Unido, vuelve a caer con fuerza hasta los 1,108 dólares, un 4% menos que hace una semana. "Estas operaciones adicionales actuarán como un respaldo adicional para restaurar las condiciones ordenadas del mercado al absorber temporalmente la venta de gilts vinculados a índices que excedan la capacidad de intermediación del mercado", alega el instituto emisor de moneda.
En su comunicado, el Banco de Inglaterra alerta del desplome del precio de los bonos y la escalada de intereses como un factor de riesgo grave. "El mal funcionamiento de este mercado y la perspectiva de una dinámica de 'venta forzosa' que se autorrefuerce plantean un riesgo importante para la estabilidad financiera del Reino Unido", añade.
El rector de la política monetaria asegura que está trabajando con las autoridades del Reino Unido para abordar el estrés en "los fondos de inversión de renta fija debido a esta volatilidad en el mercado de bonos gubernamentales (gilt) a largo plazo".
"El banco continúa monitoreando muy de cerca la evolución de los mercados financieros a la luz de la importante repreciación de activos de las últimas semanas", asegura el BoE en referencia a la escalada de intereses de sus bonos cotizados a 10 años (4,45%), 20 años (4,9%) y 30 años (4,7%).
El Banco de Inglaterra recuerda que el 28 de septiembre anunció que, en línea con su objetivo de estabilidad financiera, realizaría compras temporales y específicas de gilts para "ayudar a restaurar el funcionamiento del mercado y reducir cualquier riesgo de contagio a las condiciones crediticias para los hogares y empresas del Reino Unido". El banco central planea finalizar estas operaciones y cesar todas las compras de urgencia de gilts este próximo viernes 14 de octubre.
Este lunes 10 de octubre, el gobernador anunció medidas adicionales para respaldar el funcionamiento del mercado y el final ordenado de su programa de compra de gilts. "Estos incluyeron el lanzamiento de una Facilidad de recompra de garantía ampliada temporalmente (TECRF) a través de la cual los bancos podrían ayudar a aliviar las presiones de liquidez que enfrentan los fondos LDI de sus clientes a través de operaciones de liquidez, y la expansión de la escala de sus subastas de compra de gilts", señala.
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