Siete décimas mejor

El BCE mejora su previsión para 2020 y sitúa la caída del PIB en 'solo' un -8%

Lagarde añadió que los últimos datos sugieren un "fuerte repunte de la actividad económica", al tiempo que descarta una intervención sobre el euro y evita hablar de las fusiones bancarias.

El Banco Central Europeo (BCE) ha mejorado su previsión sobre la contracción económica de la zona del euro para 2020 hasta el -8%, frente al -8,7 % pronosticado en junio, según desveló su presidenta, Christine Lagarde, tras la reunión del Consejo de Gobierno y la decisión de mantener los tipos de interés o el ritmo de compra de activos. Al mismo tiempo recorta el crecimiento estimado para el PIB europeo en 2021 del 5,2% al 5%.

Lagarde añadió que los últimos datos sugieren una recuperación actividad económica según las expectativas de la entidad. “Los datos recibidos desde nuestra última reunión de política monetaria en julio sugieren un fuerte repunte de la actividad en línea con las expectativas anteriores, aunque el nivel de actividad se mantiene muy por debajo de los niveles que prevalecían antes de la pandemia del coronavirus (Covid-19)”, explicó la presidenta.

“La fuerza de la recuperación sigue rodeada de una gran incertidumbre, ya que sigue dependiendo en gran medida de la evolución futura de la pandemia y del éxito de las políticas de contención”, añadió. No obstante, Lagarde considera que sigue siendo necesario un amplio estímulo monetario para apoyar la recuperación económica y salvaguardar la estabilidad de precios a medio plazo. "Por lo tanto, hemos decidido reconfirmar nuestra postura de política monetaria acomodaticia", dijo la banquera francesa.

Sin comentarios sobre euro o Bankia

"No vamos a comentar niveles sobre el tipo de cambio", zanjó Lagarde al respecto de las preocupaciones sobre la fortaleza de la divisa común y su efecto sobre  la recuperación de economía europea tras el Covid-19. Antes de la rueda de prensa, la agencia 'Bloomberg' atribuyó a fuentes próximas al BCE cierta despreocupación sobre el tipo de cambio, aunque no directamente a Lagarde. "No es necesario sobrerreaccionar a la subida del euro", apuntaba el artículo en cuestión.

"El consejo de gobierno del BCE ha discutido sobre el tipo de cambio pero no ha establecido un objetivo, sino por la estabilidad de precios. La fortaleza del euro presiona a la baja a la inflación", añadió. El tipo de cambio de la moneda europea se disparaba un 0,8% en su cruce con el dólar, hasta los 1,19 unidades, aunque también subía frente a la libra o el yen.

Las fusiones bancarias y el proyecto Caixabank-Bankia, otra de las cuestiones más esperadas de la conferencia de prensa, también terminó en decepción por la ausencia  de comentarios. El vicepresidente, Luis de Guindos, fue el encargado de intervenir a petición de la propia Lagarde: "Una de las vulnerabilidades que hemos detectado es la baja rentabilidad y las bajas valoraciones. La consolidación es una herramienta para mejora los costes de las entidades, pero no tenemos ningún tipo de comentario sobre la fusión en particular [Caixa-Bankia]".

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