La crisis política de España e Italia se ha trasladado a los mercados europeos en los últimos días y se han visto sacudidos por la gran incertidumbre. Pese a todo, la situación económica y política que viven los dos países mediterráneo no es exactamente la misma.
Italia arrastra las consecuencias del auge del populismo -de izquierda y derecha- del Movimiento Cinco Estrellas y la Liga y sus políticas proclives a abandonar el euro. El gobierno de estos dos partidos supondría para Italia un importante aumento del gasto público, ya que entre sus iniciativas más importantes se incluyen ayudas a diversos sectores sociales. Además, la amenaza de abandonar el euro, presente en Italia desde su entrada en la Unión Europea, toma cada vez más fuerza.
Giuseppe Conte, el candidato de la unión de los partidos de los dos extremos, ha rechazado formar gobierno tras el 'no' del presidente de la República al ministro de economía propuesto, el eurófobo Paolo Savona. Después de la negativa, el nuevo encargado de formar gobierno en Italia sería Carlo Cottarelli, un ex del FMI apodado 'Señor Tijera' por su defensa de los procesos de consolidación fiscal, nombrado por el propio presidente de la República, Sergio Mattarella. En cambio, todos los partidos italianos han rechazado dar su apoyo al favorito de Mattarella. Por ello, las elecciones se ciernen de nuevo sobre Italia, la inestabilidad aumenta y la sombra del populismo de la Liga es cada vez más alargada.
No obstante, el caso de España es completamente diferente. Y todo pese a que el Gobierno del Partido Popular se tambalea tras la sentencia del caso Gürtel. De hecho, el anuncio y posterior registro de la moción de censura por parte del PSOE para sacar a Rajoy de su sillón de presidente hizo que el Ibex perdiese los 10.000 puntos y retrocediese en solo una semana un 6%. Además, los valores bancarios, los más afectados, se desplomaron hasta perder más de 15.000 millones de capitalización, según datos del cierre de mercados de este martes.
Sin embargo, en el caso español, el final del camino es la convocatoria de elecciones. Unos comicios en los que, según las encuestas, Ciudadanos tendrá un papel esencial a la hora de formar gobierno. Lo haga con socialistas o populares, el gabinete tendrá una estabilidad que ni siquiera ahora ostenta un Ejecutivo en minoría. Además, Podemos quedaría fuera de cualquier ecuación gubernamental, lo que aleja el fantasma del populismo. Todo un bálsamo de Fierabrás para los volubles mercados.
Diferente contexto económico
Más allá de la política, los casos de España e Italia también son divergentes en el mundo de la economía. España es el país que más crece de toda la Unión Europea, mientras Italia permanece estancado. La prima de riesgo de ambos países ha subido en los últimos días y ya se sitúa en el caso de nuestro país en los 134,4 puntos básicos y en el caso de Italia a la puerta de los 300, más del doble que hace apenas quince días.
La caída de los mercados de estos dos países se ha contagiado a bolsas como la lusa, altamente influenciada por el Ibex. Este efecto se ha trasladado también a los mercados mediterráneos y a la prima de riesgo de estos países que se ven, a menudo, afectados por el influjo de lo que ocurre en el resto de Europa. Pese a todo, los analistas consultados por La Información perciben que se trata de episodios aislados que se corresponden con periodos de ajuste y que no constituirían el inicio de una nueva crisis. "Están motivadas por causas coyunturales cuyos impactos negativos serán absorbidos por los mercados rápidamente", aseguran.
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